El mes de septiembre de 1913 fue significativo para la Revolución Mexicana, por dos grandes acontecimientos que se sucedieron en tal fecha, los dos en esta región lagunera, el primero de ellos tuvo lugar en la Hacienda de "La Loma" del estado de Durango, y el segundo tuvo lugar en esta gran ciudad de Torreón, ambos fueron decisivas para el movimiento revolucionario de 1910 por la gran trascendencia que tuvieron.
El 29 de septiembre de 1913, se reunieron en la Hacienda de La Loma, Durango, los generales Maclovio Herrera, Calixto Contreras, Tomás Urbina, Orestes Pereyra, Juan E. García, J. Isabel Robles, Eugenio Aguirre Benavides, Benjamín Bello Yurear, Toribio Ortega, Rosalío Hernández, Juan M. Medina, José Rodríguez, Blas Flores, Manuel Medina y desde luego Francisco Villa. El general Calixto Contreras, propuso a Villa como jefe de la División del Norte, siendo aceptada la propuesta por unanimidad, acordándose marchar sobre Torreón, iniciándose ese mismo día los combates para lograr tal fin.
El primer triunfo revolucionario fue el haber tomado Avilés. (Hoy Ciudad Juárez, Durango). Después de lo anterior, las tropas de Maclovio Herrera atacaron a Lerdo, Durango, el cual estaba defendido por las tropas federales de Emilio Campa, los que abrieron las compuertas de las represas a la altura del canal de Tlahualilo para detener a los revolucionarios lo cual no sucedió, logrando las fuerzas revolucionarias tomar la ciudad en cita.
Solamente tres días después de iniciados los combates por Torreón, las tropas villistas entraron a nuestra gran ciudad, iniciando el ataque en la Polvorera, Cerro de la Cruz y el de Calabazas, logrando por la noche del día primero de octubre de 1913 tomar tan importante plaza, obteniendo un botín de 11 cañones, 299 fusiles, el cañón llamado "El niño" y gran cantidad de cartuchos, ametralladoras, máquinas y carros del ferrocarril.
Las tropas de Villa entraron en orden a la plaza tomada y todos los intentos de saqueo y vandalismo, rápidamente evitados por los jefes villistas, lo que motivó se reconociera la disciplina de las tropas revolucionarias y disminuyó el temor a la revolución por las clases medias y los extranjeros, lo que facilitó enormemente el camino de los revolucionarios, que así dieron una muestra de la disciplina que el general Villa imponía a los hombres bajo su mando. En esta gran ciudad Villa dio descanso a sus tropas.
El 4 de octubre de 1913, el general Francisco Villa celebró su onomástico, y por la mañana le llevaron un grupo musical al Hotel "Salvador", en donde se hospedaba y por la noche en el "Casino de la Laguna" se llevó a cabo un banquete-baile, siendo en tal lugar en donde conoció a Juana Torres, con quien contrajo nupcias el día 7 de octubre de 1913, celebración que tuvo lugar en una casa que se ubicaba en la calle Galeana #108 de esta gran ciudad.
