Los tres primeros juegos de playoff entre Unión Laguna y Dos Laredos resultaron auténticos manjares, dignos de los paladares más exigentes, la demostración de pitcheo por ambos equipos resultó impresionante y eso trajo como consecuencia que las ofensivas se vieran anémicas; resulta ya desesperante el escaso aporte de los principales bateadores de Algodoneros, y mientras permanezcan dormidos será muy complicado superar al mejor pitcheo de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB).
El viernes se vio nervioso a Wilking Rodríguez y se metió en aprietos, pero finalmente el cerrador venezolano salió con el brazo en alto, gracias a la desesperación de los bateadores locales, quienes buscaban la barda, y no chocar la pelota, que es lo más adecuado en esos casos; para mala fortuna aparecieron los errores defensivos y se perdió un juego que pudo ser triunfo.
Un sinnúmero de comentarios aparecieron por parte de los aficionados; que Orantes debió meter un emergente por Fernando Flores, que Nick Torres debió atrapar aquel elevado de Roberto Valenzuela, que Orantes se equivocó, que acertó y demás, sin embargo, casi nadie reconoce el trabajo de Tecolotes de los Dos Laredos, el campeón en pitcheo colectivo y cuyos lanzadores en este playoff han lucido mucho más que en temporada regular.
Se debe de entender la clase de equipo que Algodoneros tiene enfrente, Tecolotes también quiere ganar y tiene muy buenos argumentos, es claro que Unión Laguna no juega ante un equipo de la Liga de Empleados y Profesionistas, tiene enfrente a un serio aspirante al título de la LMB. Hoy afloran las carencias que el equipo exhibió todo el año, como no tener un cuarto bat, un jardinero izquierdo y un pitcher abridor de categoría.
Algodoneros tuvo una espectacular reacción ante la salida de Óscar Robles, el envión anímico llevó al equipo de un récord de 9-20 en ganados y perdidos, hasta el quinto lugar de la Zona Norte, para meterse a la postemporada, pero con carencias que hoy saltan a la vista, porque los juegos de playoff son otra cosa, la exigencia es mayúscula y hay mánagers y jugadores que no pueden con la presión que eso representa.
La ausencia de un shortstop se cubrió hasta el 1 de agosto, y el jardín izquierdo se tiene que improvisar a todo un profesional como Alejandro Flores, pero cuya posición es la de receptor. Todo lo anterior parecen detalles pequeños, pero no es así, sobre todo en un equipo al que se le invirtió mucho dinero porque el objetivo es claro: ¡ser campeón!, y eso lo ha dicho en repetidas ocasiones el propietario de la organización.
Cualquiera que sea el resultado de Algodoneros en este 2022, existen muchas cosas por hacer y otras tantas por corregir; se debe retomar la base mexicana que se construía, y a la que se dio un fuerte golpe, el cual la derrumbó; Francisco Ferreiro y Ciro Norzagaray deben regresar en 2023, porque ninguno de los que vinieron han hecho un trabajo mejor en sus respectivas posiciones.
Con Ferreiro y Norzagaray, Algodoneros hoy disputaría el playoff y con las mismas, o mayores expectativas de éxito. ¿O se cree que Ciro Norzagaray no batea lo que ha bateado Solarte. ¿Se ha encontrado una mejor opción que Ferreiro para jugar el jardín izquierdo? La respuesta es muy clara y unánime entre los buenos aficionados. ¿O qué le parecería tener a Francisco Rivera listo para batear en lugar de Fernando Flores, el viernes en la última entrada?
Norzagaray, Ferreiro y Rivera querían seguir en Algodoneros, pero ninguno entraba en los planes del mánager y de la gerencia deportiva, por lo que se buscó deshacerse de ellos para suplirlos con jugadores de mayor calidad, los llamados "Refuerzos top". Hoy, agosto de 2022 ya nada se puede hacer, pero de cara a la temporada 2023 es bueno que se haga un análisis totalmente objetivo y regresar al equipo a jugadores que aquí quieren estar y lo merecen por lo hecho en el terreno de juego, y no por hablar inglés o un español típico del Caribe.
Zachary Benjamin Kirtley, Josh Smith, Allen Córdoba o Josh Lueke sí han sido verdaderos refuerzos; Sardiñas tiene esa etiqueta, pero aún le falta mucho por demostrar, aunque el esfuerzo para traerlo es digno de aplaudirse y reconocerse. Hoy se tienen al menos cuatro relevos que no se utilizan cuando hay posibilidades de ganar.
Hoy se tiene que luchar con las armas que se tienen y esperar que quienes lucieron buena ofensiva en el calendario regular, ahora lo hagan en postemporada, porque es en estas instancias en las que un jugador demuestra su valor y así obtiene el derecho de cobrar de acuerdo a los resultados que entrega.
Hoy se juega playoff y lo que se hizo en temporada regular es cosa del pasado, hay jugadores de playoff que se crecen en postemporada, pero otros que se achican en los juegos que tienen más valor e importancia; al final de esta aventura hasta donde lleguen los Algodoneros, solo quedará la frialdad de los números, esos que con su frialdad dirán quiénes deberán irse y quiénes merecen regresar; Unión Laguna es un equipo de mucha tradición, su afición es grande y conocedora, ya no se conforma con jugar de tú a tú ante el rival más calificado; hoy lo único que vale es un título.
