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La asociación Luz y Esperanza en Saltillo informó que debido a que los recursos asignados para los refugios en Coahuila, no han sido entregados, al momento el refugio ha adquirido deudas, esto para hacer frente a los gastos.
Fue en mayo de este año que la Fundación Luz y Esperanza en Saltillo informó que los procesos administrativos federales retrasaron la entrega de recursos que cada año reciben los refugios que atienden a mujeres violentadas.
En esa ocasión informó que fue en el año 2020 y 2021 que el programa fue manejado por el Instituto Nacional de Desarrollo Social (INDESOL) de la Secretaría de Bienestar y en este 2022 pasó a manos de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim), por lo que hizo un llamado para que agilizar los trámites.
No obstante, hace unos días Rosa María Salazar, directora del centro, indicó que debido a que los recursos se mantienen atrasados, se han visto en la necesidad de endeudarse e incluso pedir “fiado”, para atender gastos.
Destacó que incluso personal del refugio ha estado sin cobrar sueldos desde el mes de marzo, lo cual repercute en su vida familiar.
“Tenemos una reunión prevista para el cuatro de julio con todos los refugios que hemos firmado convenio en la Ciudad de México para avanzar con el programa. Despues de tanta espera ya estamos casi por recibir el recurso”, dijo.
Aunque se reservó a dar detalles sobre los montos que el refugio adeuda, Rosa María Salazar indicó que se tuvo que pedir préstamos.
“Se pidió prestado a particulares a personas que nos apoyan e incluso cosas fiadas para poder atender esto. Es importante que las instituciones federales estatales y municipales apoyen a las mujeres”, destacó.
No obstante, resaltó que aún resta sensibilidad a las instituciones, pues este problema no es de la sociedad sino del Estado.
Indicó que estos primeros seis meses han sido difíciles pues las asociaciones aunque no cuentan con la capacidad y los recursos suficientes, no se han negado a recibir a mujeres.
