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Ni el anuncio de que llegaron 150 elementos del Ejército a El Salto, Pueblo Nuevo, para reforzar la seguridad, ni medidas como la instalación de un botón de pánico son suficientes para que los médicos pasantes regresen a las regiones de las que fueron retirados tras el asesinato de Eric.
El director de la Facultad de Medicina de la UJED, Antonio Sifuentes Álvarez, dijo que se está a la espera del protocolo de seguridad que las autoridades se comprometieron a elaborar, para revisarlo y poder determinar si volverán o no.
“Ese protocolo aún nosotros no lo conocemos; ahora estamos hablando de que llegaron a El Salto, pero la inseguridad es en todo el estado, entonces partiendo de ahí la opinión que yo puedo dar es hasta que conozcamos cuál es el protocolo de seguridad para las instituciones de salud y para donde estén nuestros pasantes”, expresó.
Reiteró que se retiraron la mayoría de los pasantes de zonas inseguras, así como los que estaban en unidades médicas donde no había un médico responsable y ya se encuentran en áreas que sí cumplen con estos aspectos básicos.
“Además de que ya no van a hacer guardias, van a tener un horario de 8:00 a 4:00 y ya con eso les estamos quitando gran parte del riesgo, sin embargo, faltan todavía las acciones que vaya a emprender el Gobierno del Estado y obviamente los gobiernos municipales y los comisariados ejidales para brindar la seguridad a nuestros pasantes, eso aún estamos por escucharlo”, señaló.
Se retiraron de El Salto, Pueblo Nuevo y de otras regiones alejadas, principalmente zonas limítrofes con Sinaloa.
Un total de 97 pasantes de esta Facultad fueron reacomodados y el primero de agosto iniciará un nuevo grupo de jóvenes del siguiente semestre quienes se irán a comunidades que cumplan con las condiciones establecidas.
Y reiteró que “en este momento no se puede eliminar el servicio social” porque está en una ley federal y requiere un proceso exhaustivo de análisis.
Únicamente en caso de que haya una propuesta del Estado, en coordinación con otras entidades, podría analizarse por los legisladores federales abolirlo, pero sería en el largo plazo.
No obstante, no descartó que se puedan hacer cambios en el servicio social, como parte de la propuesta del nuevo plan de estudios que se analizará.
