En la década de los años cincuenta el futbol soccer era poco practicado en la ciudad de Saltillo, el béisbol dominaba el panorama deportivo tanto a nivel aficionado como profesional. La capital del Estado contaba con el equipo Club 45 en la desaparecida Liga Central Mexicana. El futbol americano, el basquetbol, el voleibol y el atletismo empezaban a trascender en los planteles educativos; en el ciclismo destacaba Óscar “El Chango’’ Vélez.
El futbol soccer saltillense nació en diferentes barrios, entre los más conocidos podemos mencionar al Barrio del Santuario de Guadalupe, el de Colón y Salazar, el de Álvarez y Emilio Carranza, el de Obregón, el de San Lorenzo, el de Doblado y Penquita, el de la Ramos Arizpe y el Callejón del Diablo con el equipo Cuauhtémoc. La ACJM contaba con su representativo, al igual que el Tecnológico de Saltillo, la Normal del Estado, el Colegio México y la Escuela Superior de Agricultura “Antonio Narro’’.
El desaparecido Estadio Saltillo con su campo de tierra propició la práctica del futbol soccer por su cercanía con los barrios mencionados. Por su barda del lado Sur colindaba con calle Colón, su lado Norte con calle Ramos Arizpe, frente al hermoso Lago de la Alameda Zaragoza, su costado Oriente con calle Obregón y al Poniente con Salazar, barrio donde el fútbol fue promovido por don Amador Rodríguez Torres.
Las mencionadas calles estaban ubicadas a unas cuantas cuadras del centro de la ciudad. El Santuario de Guadalupe y los restantes barrios no se encontraban lejos del Estadio Saltillo, escenario principal, construido por Don Nazario Ortiz Garza. Además, estaban los campos del Tecnológico de Saltillo, Ateneo Fuente, Harvester, Textil Santa María y Colmex.
En el lado Sur del Estadio Saltillo surgió el equipo Colón y Salazar bajo la tutela de Bernardo Mellado de León, en el que militaban Ambrosio “El Buchis’’ Lara, “El Flaco’’ Raúl, “El Mudo’’ Haro, “El Pingüino’’ Valero, Víctor Manuel Mendoza, Rodolfo Valdés Sánchez, Horacio “El Bacho’’ Ramos, José “La Tripa’’ Estrada, los hermanos Jaime, Javier, Marco Antonio y César Arturo Rodríguez Gómez. Por el lado Norte apareció el equipo Ramos Arizpe, integrado por “El Cerillo’’ Aguirre, los hermanos Rogelio y Ramiro Valdés Sánchez, Ricardo Reynosa, Enrique Soto, Gerardo Cabello, Teodoro Sánchez, Antonio Cortés y Jesús Sade, entre otros.
En el equipo Asturias del barrio de Obregón, patrocinado por José González, mejor conocido como “Pepe Bola’’, destacaban Jesús Alfonso Arreola Pérez, Roberto “El Pelón’’ Reyes, Luis Cedillo, Ricardo Cedillo Martínez, Alfonso Montaño Jr., los hermanos Eleazar y Juvenal Valdés, Roberto Huerta y Marco Antonio “El Chilacuis’’ Brondo. Posteriormente se llamó San Lorenzo.
Los equipos en mención participaban en el Torneo de los Barrios, organizado por el desaparecido periódico El Heraldo del Norte. A cargo de la organización estaba José González, “Pepe Bola’’, en ese entonces empleado administrativo de Ferrocarriles Nacionales de México, quien por esfuerzo propio realizó en la edad adulta sus estudios de Secundaria, Preparatoria y Normal Superior, graduándose finalmente de Catedrático.
José González, gran promotor del futbol saltillense, llevaba buena relación con el Dr. Carlos Canseco, directivo del Monterrey, quien apoyó a Roberto “El Pelón’’ Reyes, primer saltillense que incursionó en el futbol profesional con el equipo Quetzaltenango de Guatemala.
El Gral. José Manuel Núñez, propietario del Atlante y ex presidente de la Femexfut, apoyó a “Pepe Bola’’ para que formara el equipo Atlante categoría Juvenil en la ciudad de Saltillo, en el que jugaban Leonardo “El Nayo’’ García y su hermano Roberto, Gabriel “La Chita’’ Berumen y Fermín “La Torta’’ Hernández.
En el barrio de la Álvarez y Emilio Carranza nació el equipo Botafogo de los hermanos Narro, conocidos como “Los Papalotes’’, “El Chóforo’’ Briseño, “La Bruja’’ Salas, Jesús “El Suril’’ Celedón y Eduardo “La Negra’’ Rodríguez Frausto, entre otros; en el Independiente jugaban Oscar “Canelo’’ de la Peña y su hermano Rubén, Agustín Benítez, los hermanos Javier y Napoleón Alcalá.
Un grupo de jóvenes se reunían semanalmente en una casa ubicada en el crucero de calle Purcell y Lerdo de Tejada bajo los auspicios del sacerdote Luis Manuel Guzmán del Santuario de Guadalupe, otro promotor incansable del futbol saltillense, quien entrenaba a niños y jóvenes en un lote baldío ubicado por la Emilio Carranza a un costado del patio de Ferronales.
En el barrio de Doblado y Penquita surgió el Club Independiente Doblado, capitaneado por Carlos Ayala Ramos y “Chago’’ Martínez. Bajo el auspicio de la desaparecida Planta de Luz y Fuerza de Saltillo nació el equipo Necaxa de los hermanos Eleazar, Juvenal y Eruviel Valdés, “El Negro’’ Camacho, Ovidio Arévalo, Babeliano Ramos, “Periquín’’ Torres, Pedrito Martínez, los hermanos Arturo y Héctor Hernández.
No se puede olvidar al Santos del Santuario de los hermanos Marco Antonio y Jorge Gámiz, conocidos como “Los Químicos’’, en este equipo jugaban también “El Chaparro’’ Espinoza, “El Querétaro’’ Hernández, Sergio Revueltas, Guillermo Equígua, Gabriel Calvillo (estos tres últimos llegaron del Morelia de Segunda División) y Miguel “El Chóforo’’ Briseño, quien estuvo a prueba en 1958 con el Laguna.
La designación del Ing. Oscar Peart Pérez en 1954 como director del Instituto Tecnológico de Saltillo fue importante para la promoción del futbol soccer en este plantel. Cuando el equipo Monterrey regresó a Primera División en 1960 invitó a los ex jugadores Horacio Casarín, Héctor “Cacho’’ Uzal y Jorge José Gilardoni para que dieran una plática a los alumnos sobre sus experiencias en el futbol profesional.
Mención especial merecen los ingenieros italianos Ricardo Ainsle y Ferrucho Beltraneti, quienes promovieron el futbol entre los obreros de una fábrica de motocicletas de conocida marca; y que decir del Colegio México, donde los hermanos salesianos formaban equipos competitivos de diferentes categorías.
En agosto de 1963 nació el Club Tigres de Salazar, comandado por los hermanos Huerta Gil y los Rodríguez Gómez, siendo uno de los equipos de mayor permanencia en la Liga Municipal de Futbol con una reconocida trayectoria de 58 años. A todos ellos podemos considerar como los precursores del futbol saltillense. ¡Hasta el próximo miércoles!
