Ayer Día del Padre se pudo observar a personas que ingresaron a algunos de los panteones municipales de Torreón. (JESÚS GALINDO)
Con motivo de la celebración del Día del Padre, hubo algunos habitantes de Torreón que lograron ingresar ayer por la mañana a algunos de los cementerios municipales, pese al anuncio de las autoridades referente a que estos permanecerían cerrados para evitar la propagación y el contagio del COVID-19.
Ayer domingo se pudo observar a muy pocas personas que acudieron con sombrillas, flores y artículos de higiene para realizar la limpieza de las tumbas de los padres que se adelantaron en el camino y que, aunque pase el tiempo, son venerados por sus familias. Algunas mujeres y hombres ingresaron a bordo de sus automóviles. Bajaron sillas, hieleras, cubetas y agua embotellada.
Después de las 15:00 horas de ayer, el director de Inspección y Verificación Municipal, Juan Antonio López González, dijo que no se reportaron incidencias en los panteones municipales y agregó que en el caso de los cementerios ubicados en los ejidos, habían estado invitando a la población a evitar aglomeraciones.
En los panteones particulares, como Jardines del Tiempo, la Coordinación de Padrones de la Secretaría de Finanzas del estado informó que de las 7 a las 10 de la mañana se había registrado una afluencia de cerca de 600 personas. Al exterior de este cementerio se pudo observar la presencia de vendedores de flores.
De acuerdo a las determinaciones del Subcomité Técnico de Salud en La Laguna y a diferencia de los panteones municipales, los cementerios particulares sí pudieron operar el día de ayer, pero apegados a los protocolos sanitarios contra el virus SARS-CoV-2. Por ello, fue necesario que la ciudadanía ingresara con cubrebocas y atendiendo el distanciamiento social.
En México, el Día del Padre es celebrado el tercer domingo del mes de junio.
Este año, la festividad coincide con la pandemia por el COVID-19, por lo que el llamado de las autoridades fue a celebrar atendiendo las disposiciones sanitarias.
