Voceros de la dependencia de procuración de justicia indicaron que se trata de información reservada que es parte de la investigación. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Buscan restos de mujer reportada como desaparecida en Torreón, corporaciones peinan el Cañón del Indio ubicado en la colonia Las Luisas de esta ciudad. Se informó de una investigación por un presunto feminicidio y se presume que el cuerpo fue arrojado en el lugar.
Desde el pasado lunes por la tarde, elementos del área de feminicidios de la Fiscalía General del Estado, de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y binomios caninos de la Dirección de Seguridad Pública (DSPM), se desplegaron en esta zona serrana.
A la búsqueda también se integró el personal del departamento de Bomberos y de Protección Civil del Estado, quienes colaboran con las autoridades mencionadas. Fuentes de seguridad informaron que las acciones van encaminadas a la localización de los restos de una mujer de nombre Karla Teresa Padilla Ramírez de 31 años de edad.
Esta persona fue reportada como no localizada desde el pasado lunes 30 de mayo del presente año ante la Fiscalía Especializada de Personas Desaparecidas.
La última vez que se le vio con vida vestía una blusa gris, un mallón color azul y tenis blanco con verde de la marca Charly.
INFORMACIÓN RESERVADA
La Fiscalía General del Estado de Coahuila, delegación Laguna I, no brindó mayores detalles sobre la búsqueda, solo confirmó que se trata de diligencias relacionadas con un feminicidio.
Voceros de la dependencia de procuración de justicia, indicaron que se trata de información reservada que forma parte de la carpeta de investigación.
Se indicó que el caso está relacionado con la desaparición de Karla Teresa de 31 años, ocurrida a finales del mes de mayo en la ciudad de Torreón.
CONTINÚAN LAS LABORES
Las autoridades están a la espera de la llegada de rescatistas especializados de la ciudad de Saltillo.
También se informó que se integrarán a la búsqueda otras unidades de binomios caninos procedentes de la capital del estado.
Los restos presuntamente fueron arrojados en un barranco de más de 200 metros de profundidad.
