EDITORIAL Caricatura Editorial Columna Astillero Sergio Sarmiento editoriales

Tres de Coahuila

No hagas cosas buenas...

ENRIQUE IRAZOQUI

Pasado mañana se deciden muchas cosas. Por supuesto está en juego la renovación de la Cámara de Diputados, donde están en juego las 500 curules que luego de las votaciones de este domingo serán determinantes en el derrotero que tome la segunda parte del casi sexenio que gobernará (si es que luego no le da por buscar la hoy proscrita reelección para presidente de la república) el tabasqueño Andrés Manuel López Obrador.

El Gobierno del exjefe de Gobierno de la Ciudad de México ha polarizado de tal manera que por primera vez en más de 80 años en una parte importante del territorio nacional hay formalmente una alianza entre el PRI y el PAN (más allá del término prianismo).

Los electores que habremos de ir a las urnas tendremos mayormente entre dos sopas, no así en el caso particular de Coahuila donde los priistas y panistas no se sumaron al proyecto aliancista que por ejemplo sí ocurrió en Durango: o se apoya al Gobierno de López Obrador votando por Morena o alguno de sus partidos satélites o se opta por tratar de ejercer resistencia ante la concentración de poder que el presidente intenta lograr para sí, aun en contra en la institucionalidad del andamiaje en el Estado mexicano.

En lo particular, en el estado de Coahuila además de definir quiénes serán los siete diputados de mayoría que emergerán de sendos distritos federales ubicados en esta entidad federativa, los coahuilenses también se preparan para elegir a los alcaldes de sus 38 municipios.

Debido a la reforma electoral ocurrida durante el sexenio de Enrique Peña Nieto donde se dio luz verde a la reelección consecutiva de presidentes municipales por un periodo, diputados hasta por 3 ocasiones pudiendo, si el electorado se lo permitiese, permanecer en esa posición hasta por doce años y en el caso del senado autorizando solo una para que en caso de ganar el interesado en las urnas pueda retener su escaño también por una docena de años de manera ininterrumpida. La misma reforma obligaba a los estados a empatar cualquiera de sus tres elecciones locales (para elección del gobernador, de diputados locales o de presidentes municipales); en el caso de Coahuila se optó por que sean las presidencias municipales las que entren en juego a la par de los comicios federales. Para ello el Congreso local determinó crear miniadministraciones municipales de un año para que luego lo sucediera una regular de 3 años. Así fue como el priista Manolo Jiménez Salinas en la capital del estado y los panistas Jorge Zermeño de Torreón y Alfredo Paredes en Monclova fueron electos por un año primero y los tres ganaron su reelección para ahora gobernar por un trienio. Al término del mismo, Jiménez, alcalde Saltillo, y Paredes, de Monclova, buscaron encontrar un recoveco a la ley para intentar una segunda reelección consecutiva. Luego de litigarlo y perderlo Manolo continúa como alcalde en funciones en tanto Alfredo Paredes y Zermeño con sus respectivos municipios solicitaron licencia para separarse de su cargo, puesto que ahora aspiran a convertirse en diputados federales por mayoría.

Así entonces, como en Coahuila no hubo alianza entre PRI y PAN, se espera para el domingo una competencia muy interesante por las tres alcaldías principales del estado. En la capital solo Jesús María Frausto Siller, del PRI, y el senador con licencia de Morena, Armando Guadiana Tijerina, tienen opción real de triunfo. Hay encuestas y rumores que tratan de favorecer a cualquiera de estos dos contendientes; lo cierto es que si en una ciudad del estado el PRI y su alcalde están fuertes, es precisamente en Saltillo, por lo que parece un hecho que el priista se quede. El PAN en Saltillo no tiene probabilidad alguna.

En Monclova, Alfredo Paredes parece que dejó las cosas de tal manera para que el candidato de su partido pueda sucederlo; al doctor Mario Alberto Dávila Delgado aparentemente le va a alcanzar para superar de manera apretada a su contrincante del PRI, María Guadalupe Murguía Carranza.

Caso especial es Torreón. Aquí la cosa llega a un final de tres. El PRI con su sólida estructura y el apoyo total del gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís, con todo lo que esto signifique, tiene a Román Alberto Cepeda González olfateando el triunfo, pero la entelequia creada por Morena ante la resolución de las autoridades electorales de retirarle la candidatura a Luis Fernando Salazar Fernández y postular al padre de este, Luis Fernando Salazar Woolfolk, está también en la competencia, así como lo está el panista Marcelo Torres Cofiño, quien ha logrado mantenerse en la contienda.

El tema, según los que dicen saber de política local, es que en caso de que el Gobierno de Riquelme se viera obligado a aceptar que su candidato no pudiera salir victorioso preferiría a Torres Cofiño que a los de Morena, por lo que se puede adelantar un final de fotografía no entre dos, sino tres, cosa inusitada.

El domingo por la noche se conocerá el desenlace. En el plano nacional se sabrá realmente qué parte del electorado permanece con López Obrador a nivel local, interesante y cerrado al fin, tanto en Saltillo como en Torreón y Monclova, las tres ciudades principales de Coahuila.

Leer más de EDITORIAL

Escrito en: NO HAGAS COSAS BUENAS...

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de EDITORIAL

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1919021

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx