Karl F. Gauss fue un famoso matemático alemán que vivió entre los años 1777 y 1855.
Estaba casi todo el tiempo tan concentrado en su trabajo que casi nada lo perturbaba. Una tarde un colaborador ingresó con gran preocupación a darle una terrible noticia: Su esposa estaba a punto de morir y debía acudir de inmediato.
Gauss como de costumbre estaba inmerso en su trabajo y luego de escuchar el mensaje respondió: "Sí, sí, ya voy...pero pídale que espere un momento hasta que acabe con esto".
El célebre golfista Tiger Woods además de su extraordinaria fortaleza mental, ha ganado muchos de los principales torneos valiéndose de una gran concentración. Una vez confesó que mientras camina por el campo de juego y lo siguen miles de aficionados, está tan concentrado que no puede ver o escuchar a nadie.
En los momentos culminantes de nuestro trabajo es esencial mantener la atención en forma intensa.
La mente está en estado de ebullición. Nadie puede controlarla. Por lo tanto, si estamos haciendo algo que no nos mantiene enfocados, ella viajará y será muy difícil estar concentrados.
Cuando un niño juega y se divierte, es difícil que escuche a sus padres o advierta algo fuera del juego. Está consustanciado, involucrado, totalmente presente.
Rara vez advertimos a alguien que trabaja con la misma actitud.
Un simple test, sobre todo con quienes realizan tareas de atención al público, es interrumpirlos o buscar sus ojos. La mayoría no advertirá nuestras señales. No porque estén concentrados en sus tareas, sino por el contrario, navegan con sus mentes, lejos del lugar.
Los errores provienen de la dispersión, producida por la falta de interés o el agotamiento. Si hurgamos en las fallas, la inmensa mayoría de ellas tienen su raíz en un instante de desatención.
En un congreso de contact center una persona mencionaba que habían invertido mucho dinero en entrenamiento, pero el principal déficit de los operadores era justamente la falta de atención. Esto provocaba innumerables errores de registro y pérdidas millonarias.
¿Puede enseñarse a los que trabajan a estar más concentrados?
Un enorme desafío, pero sin duda posible. Una clave es encontrar un vínculo entre el que realiza una tarea y el propósito. Recuerdo una experiencia en una empresa citrícola en la que había muchos errores en el proceso de cosecha. Esta se realizaba manualmente y los cosechadores no estaban interesados en lo que hacían. En vez de cortar la fruta al ras, dejaban un pequeño tallo que horadaba la fruta al almacenarla.
Observé el trabajo y la actitud y pregunté si sabían la importancia de lo que hacían. Me respondieron con indiferencia. Busqué videos de destinos de exportación y compartí con ellos cifras, mapas, todo lo que encontré para que comprendieran que lo que hacían era muy importante y además ese producto representaba al país.
¿Tuvo resultado la prédica? Bajaron los errores por desatención.
Cuando alguien está concentrado puede anticipar, planear, actuar con efectividad, percibir, sentirse parte del todo, darse cuenta.
Te invitamos a inscribirte en nuestra página www.vibremospositivo.com para darte más información de nuestro movimiento y seguirnos en Facebook como Vibremospositivo, en Instagram como @jorge_lpz, @vibremos_positivo2020 y @claudiopenso. También todos los viernes estrenamos podcast por Spotify.
