Hoy en punto de las 12:00 del día, en la Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe, se celebró la misa Crismal en donde fueron bendecidos los santos óleos y los sacerdotes renovaron sus votos. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Después de que el año pasado el inicio de la pandemia por el COVID-19 impidiera a la Diócesis de Gómez Palacio, celebrar su Misa Crismal como parte de los ritos de la Semana Santa de manera presencial, hoy esto fue posible.
Hoy en punto de las 12:00 del día, en la Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe, se celebró la misa Crismal en donde fueron bendecidos los santos óleos y los sacerdotes renovaron sus votos.
Julio Carrillo Gaucín, Vicario de la Diócesis, explicó que en esta celebración, el obispo Jorge Estrada, bendice los aceites que se utilizan en los sacramentos, son tres clases: uno es el santo óleo que se utiliza en el bautismo, el otro el Santo Crisma, que es el óleo perfumado que lleva tres esencias, de nardo, jazmín y sándalo, para el sacramento para la confirmación pero también se utiliza para los sacerdotes, donde sus manos se ungen. También está el óleo de los enfermos.
“Es una celebración más bien sacerdotal, en esta eucaristía los sacerdotes renovamos nuestras promesas sacerdotales: la obediencia, el celibato y la consagración a la iglesia”, explicó.
Un total de 52 sacerdotes acudieron a esta celebración manteniendo la sana distancia y todos los protocolos de salud que obliga la pandemia.
Además se permitió el acceso a un reducido grupo de fieles, ya que de acuerdo a las indicaciones de las autoridades estatales que obliga el semáforo amarillo de riesgo epidemiológico, sólo se permite el acceso al 50 por ciento de la capacidad del templo. En esta ocasión, lució menos de ese porcentaje.