Sevilla llega al partido de hoy con una racha de nueve victorias. (EFE)
Sevilla Fútbol Club y Borussia Dortmund encaran hoy el primer asalto de los octavos de final de la Liga de Campeones con rachas opuestas, en un momento dulce los españoles y con dudas los germanos, y con Jules Koundé, un seguro de vida en la zaga local, y Erling Haaland, goleador del equipo alemán, como duelo estelar.
En un Sánchez-Pizjuán desierto, sin aficionados por culpa de la pandemia y lejos de la olla a presión que siempre ha sido en las grandes citas europeas, el francés Koundé y el artillero noruego Haaland, jóvenes figuras por las que suspiran los grandes de Europa, se verán frente a frente en una cita donde, más allá de individualidades, mandará la fuerza del colectivo entre dos bloques potentes.
Aparte de Koundé, un defensa versátil y que se incorpora con peligro al ataque (3 goles), y de Haaland, con 23 tantos en 23 partidos (6 en Champions), también reivindicarán su cuota de protagonismo gente de calidad como el croata Ivan Rakitic, el argentino Papu Gómez o el marroquí Youssef En-Nesyri, máximo goleador sevillista con 17 dianas (4 en el torneo europeo), y, por el otro bando, el extremo inglés Jadon Sancho o el veterano Marco Reus.
El Sevilla está batiendo récords y buscará en este choque de máxima exigencia, que puede marcar un punto de inflexión en el caminar de ambos equipos, alargar su gran momento al llevar nueve triunfos seguidos entre Liga y Copa y siete de ellos con la portería a cero, ayudado por su fortaleza defensiva, su equilibrio y también por grandes paradas del marroquí Yassine Bono.
Por su parte el Dortmund llega al juego con apenas dos victorias en sus últimos siete encuentros.