Con la complicidad de inusuales fallos de Allison Becker, Manchester City Football Club desmanteló ayer 4-1 a Liverpool Football Club, propinándole a los actuales campeones de la Liga Premier su tercera derrota sucesiva en la previamente inexpugnable fortaleza de Anfield.
La primera victoria del City en Liverpool desde 2003 azuza las pretensiones del equipo de Pep Guardiola de volver al trono de la máxima división del futbol inglés.
Mientras que el City le sacaba cinco puntos de ventaja a su perseguidor inmediato Manchester United en la cima de la clasificación, Liverpool quedó 10 puntos detrás de los líderes en una tambaleante defensa del título.
El tercer gol fue obra de Raheem Sterling con un cabezazo.
Habría que remontarse a 1963 para la última vez que Liverpool encadenó tres derrotas como local. Y en un estadio en el que había estado invicto en 68 partidos hasta que Burnley le ganó el mes pasado y Brighton siguió con otra victoria el miércoles.
Después de malograr un penal en la recta final de la primera parte, Ilkay Gundogan anotó cuatro minutos después de la reanudación tras el primero de los errores del brasileño Allison - cuando no pudo contener un remate.
No por nada el técnico de Liverpool Jürgen Klopp dijo que Alisson acabó muy afligido.
Mohamed Salah niveló transitoriamente de penal para Liverpool antes del segundo tanto de Gundogan.
El City cedió mansamente el título la pasada temporada. A esta altura de ese curso, Liverpool ya tenía una ventaja de 16 puntos sobre un equipo de Guardiola que marchaba segundo.
Ahora Liverpool se aferra como puede a la cuarta plaza para estar presente en la próxima Liga de Campeones.
Ilkay Gundogan anota el primer gol del Manchester City, en la victoria de su equipo 4-1 sobre Liverpool. (AP)