Son pocas las personas que permanecen en resguardo en la Casa del Adulto Mayor y hasta el momento no se ha registrado ningún contagio de COVID-19.
Hasta ahora no se ha registrado un brote de Covid-19 en la estancia del Adulto Mayor que se encuentra en el municipio de Francisco I.Madero pues se cumplen con todos los protocolos y son pocos las personas que se tienen en resguardo, por lo que se disminuye considerablemente el riesgo.
"Con la pandemia se han reforzado las medidas con ellos y están totalmente cuidados y la personas que trabajan en la instancia como enfermeros, cocineros, trabajadoras sociales o personal de limpieza también están en vigilancia constante incluso a diario deben llevar un cambio de ropa, para ingresar al lugar" resaltó la presidenta del DIF Irais Arreola Borrego.
Agregó que actualmente son 7 adultos mayores los que residen en la casa, puesto que el DIF se hace cargo totalmente de ellos al no contar con un familiar cercano que se encargue de ellos, por lo que viven en la instancia vigilados por un médico y una nutrióloga, incluso además de los alimentos y un lugar donde pasar sus días cómodamente se encargan de facilitarles los medicamentos ya que si bien cuentan con servicio médico en ocasiones no hay en existencia las formulas a diario deben tomar para el control de sus enfermedades, incluso también cuentan con una pensión que ellos lo administran para comprar artículos de higiene personal o simplemente para "cumplirse un gusto".
"Ahorita tenemos siete, pero hay capacidad para recibir de veinte a veinticinco abuelitos, hay un área que se acaba de rehabilitar y los podemos albergar cómodamente, cumpliendo con las especificaciones sanitarias por el Covid 19".
La presidenta del organismo asistencial agregó que además cuenta con un programa AMA (Adultos Mayores en Abandono) que otorga el DIF Estatal en donde también se visita a 60 personas para entregares lo apoyos alimentarios que facilita el estado y hay otros 40 abuelitos que también se hace cargo el DIF Municipal y muchos de ellos también están solos pero tienen sus viviendas y se resisten a dejarlas para alojarse en el albergue. A todos también se les visita frecuentemente para que el médico y la nutrióloga los atienda.
