La fila recorría la calle Allende hasta llegar a la Aquiles Serdán, casi a la esquina de la siguiente cuadra de la calle Aldama en Lerdo.
Por segundo día consecutivo, adultos mayores se aglomeraron a las afueras de la empresa Telecomm en Lerdo en espera de cobrar la pensión que reciben por parte del Gobierno federal, por lo que el departamento de Prevención Social buscará un acercamiento con el coordinador del programa Bienestar, Saúl Arellano, a fin de solicitar mayor organización que garantice la seguridad de los beneficiarios, quienes en esta pandemia del COVID-19 son los más vulnerables.
El personal de Bienestar reconoció que debido a un error de impresión en el concepto "bimestre de pago" en el que aparece la fecha 1 de enero de 2020 y no de 2021, se detuvo el pago por parte de la empresa Telecomm hasta que autoridades federales dieran instrucciones.
Arellano aseguró que al reactivarse el pago se atendió hasta la última persona que se encontraba en la larga fila, en la que muchos de ellos tenían desde las primeras horas del día, en espera de recibir su pago. Fue a las 4 de la tarde que se pagó la pensión al último beneficiario.
Las aglomeraciones siguieron, tanto que fue necesario cerrar nuevamente el paso a los vehículos por la calle Allende para evitar un accidente entre los adultos mayores.
Ayer, el mismo personal informó que solamente se pagaría a 200 personas, sin embargo los beneficiarios no fueron notificados de manera oportuna, quienes por horas esperaron a fin de recibir su recurso. Las personas que no pudieron cobrar su pensión deberán regresar hoy jueves.
Debido a la gran cantidad de adultos mayores, la fila recorría la calle Allende hasta llegar a la Aquiles Serdán, casi a la esquina de la siguiente cuadra de la calle Aldama.
El titular de Prevención Social, Conrado Antúnez, solicitó un encuentro con el gerente de la empresa Telégrafos, quien manifestó que fuera de las instalaciones era una responsabilidad de Bienestar organizar a los beneficiarios.
Por esta razón, el funcionario se reunirá hoy con el coordinador del programa con la finalidad de diseñar una estrategia de pago que no exponga a un contagio a las decenas de adultos mayores, y en caso de no acatar la invitación, "se tomarán otras medidas".
Además de desesperación había miedo entre los adultos, ya que muchos se han mantenido en resguardo. Entre ellos estaba una mujer de avanzada edad con careta, cubrebocas y guantes improvisados con bolsas de plástico, para evitar un contagio COVID-19 pues padece cáncer y "si me llego a contagiar. me muero", reclamó.
Otros criticaron el actuar de la autoridad por no poner orden en la forma inmediata en el pago de la empresa, "como sí en las fiestas llegan y las suspenden y aquí que somos vulnerables no hacen nada".
