El púgil capitalino Eduardo Martínez, exseleccionado nacional e invicto en el profesionalismo, ha tenido un meteórico inicio de su andar en el boxeo de paga, consolidándose como uno de los peleadores más destacados de la nueva ola de talentos. (ESPECIAL)
El púgil capitalino Eduardo Martínez, exseleccionado nacional e invicto en el profesionalismo, ha tenido un meteórico inicio de su andar en el boxeo de paga, consolidándose como uno de los peleadores más destacados de la nueva ola de talentos.
Martínez, con 6 triunfos, sin derrota y 5 nocauts; consiguió cinco medallas en la Olimpiada Nacional, tres oros, una plata y un bronce; un historial que lo llevó a ser seleccionado en el Centro Nacional de Alto Rendiemento (CNAR) donde fue discípulo de los medallistas olímpicos Juan Paredes y Agustín Zaragoza.
El boxeador orgullo de Xochimilco, en la Ciudad de México; ha avanzado a pasos agigantados en el pugilismo, y ha demostrado que es dueño de una pegada de respeto, pues únicamente uno de sus rivales ha logrado sobrevivir a la larga ruta, aunque terminó por cargar con la derrota.
Sostuvo un par de combates en este 2020. En agosto sostuvo una guerra sin cuartel frente a Mario "Tachi" Yáñez en duelo a 8 asaltos que terminó a su favor en las tarjetas de los jueces; mientras que en noviembre arrolló al capitalino Víctor Hernández a quien pese a su feroz oposición terminó por someter con su potente pegada.
De apenas 20 años, el pugilista recién graduado de la licenciatura en Entrenamiento Deportivo, continúa metido de lleno en la sala de prácticas para volver al campo de batalla y continuar demostrando su calidad arriba del ring.
