Con un triunfo, los Acereros eliminarían de la pelea por el título del Norte de la Conferencia Americana a Baltimore, el campeón reinante. (EFE)
A Mike Tomlin no le gustan las especulaciones. El entrenador de los Acereros de Pittsburgh prefiere lidiar con lo que sucede en el momento, no con lo que podría ocurrir.
GRAN RIVALIDAD
En esta temporada ha desafiado esa postura. Los invictos Acereros (10-0) recibirán esta tarde a unos diezmados Cuervos de Baltimore (6-4) en un duelo que fue reprogramado tres veces: primero del Día de Acción de Gracias al domingo, después al martes y ahora al miércoles. Se trata del primer encuentro de la liga programado para un miércoles desde el duelo inaugural en el 2012; el partido comenzará a las 14:40 horas, tiempo de la Comarca Lagunera.
"Hay que atender el día a día", admitió Tomlin. "Es una situación delicada". Y también cambiante. Los Cuervos tenían inscrita a más de una docena de jugadores en la lista de COVID-19 el martes, un grupo que incluye a Lamar Jackson, el Jugador Más Valioso de la campaña anterior.
La NFL intenta a toda costa terminar una campaña regular de 16 encuentros en 17 semanas. Prueba de esto fue la derrota de Denver, que no tenía mariscal de campo, el domingo ante Nueva Orléans.
"Entendemos que cada equipo está pasando por algo similar", dijo el defensivo profundo de los Acereros Cam Heyward. "No a este grado, pero tenemos que estar listos para cualquier situación".