Me habría gustado conocer a este camarógrafo de cine cuyo nombre en este instante no recuerdo.
Fotografió a una actriz, que luego llegaría a ser famosa, en una de sus primeras películas.
Dos décadas pasaron, y el mismo cineasta volvió a fotografiar en otro film a esa misma actriz.
Después de ver la película ella le reclamó al camarógrafo:
-Hace 20 años usted me fotografió, y el resultado fue excelente. Ahora ha vuelto a fotografiarme, y ya no salí yo tan bien.
Sin vacilar respondió él:
-Señora: tome usted en cuenta que cuando hicimos la primera película yo era 20 años más joven.
No dijo: "Usted era 20 años más joven". Eso seguramente habría ofendido o lastimado a la artista. Dijo: "Yo era 20 años más joven". Tomó él la responsabilidad de aquello de que no era responsable.
¿Cómo llamar a eso? ¿Tacto? ¿Galantería? ¿Diplomacia?
Yo tengo un mejor modo de llamarlo.
Bondad humana. Generosidad.
¡Hasta mañana!...