La formalización de lazos con EAU abre las puertas en el Golfo Pérsico. (EFE)
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, animó a Emiratos Árabes Unidos (EAU) a devolver la visita que, con el primer viaje comercial de una delegación israelí-estadounidense, ultima el establecimiento de relaciones diplomáticas bilaterales.
"Les daremos la misma alfombra roja que nos dieron a nosotros", declaró Netanyahu en una rueda de prensa, en la que celebró la "histórica" llegada a Abu Dabi para avanzar en un acuerdo, mediado por la Casa Blanca, que se firmará en Washington en las próximas semanas.
"Hay diálogos con más Estados, espero que haya más acuerdos", agregó en referencia a otros países árabes de la región con los que Israel podría normalizar relaciones, sin dar más detalles.
Existen muchas cuestiones que "aún no puedo contar", pero en algún momento "saldrán a la luz", aseguró ante los periodistas.
Desde que Washington anunció el acercamiento entre Israel y EAU el pasado 13 de agosto se especula con que otros Estados, como Sudán, Omán, Baréin o Marruecos, podrían seguir el mismo camino, pero por ahora no ha habido ningún paso oficial en esta línea y altos cargos de estos países se han apresurado a desmentirlo.
"Hemos convertido a Israel en un Estado muy fuerte", añadió Netanyahu.
Según aseguró, la formalización de lazos con EAU abre las puertas en el Golfo Pérsico y le da oportunidades económicas nuevas para impulsar el crecimiento con uno de los países más dinámicos de la región.