(ESPECIAL)
El Colegio Miguel Ángel cumple este 2020 su 50 aniversario, festejo interrumpido por la pandemia del Covid-19 que trajo un gran desafío para la educación mundial. Más que verlo con nostalgia, lo tomaron como motivación para emprender así la estrategia educativa para cerrar el ciclo escolar y arrancar uno nuevo de forma virtual, transmitiendo la esencia de la institución hasta cada casa, entendiendo que son prestadores de un servicio que de pronto se vio trunco y debe prevalecer la calidad acostumbrada.
El trabajo en equipo del cuerpo docente desde el día uno que se detuvieron las clases presenciales hasta la fecha y la comunicación con los padres de familia que los distingue desde siempre, ahora desde grupos de whats app, por teléfono y toda herramienta al alcance, han sido la base para llevar por buen camino los planes de estudio en todos sus niveles.
Adriana Eugenia García Dávila, Directora Académica y Coordinadora de Jardín de Niños, con más de 20 años en la institución, describe que a pesar de la pantalla que los separa, los momentos en que la tecnología falla y el estrés del encierro, cada sesión en vivo o grabada se brinda con dinamismo y actitud, similares a las presenciales, siempre acompañados de la calma que da una oración, pues son un colegio católico y es parte de su sello. “La disciplina con amor, basada mucho en la comunicación, en darse tiempos fuera para conocerse papá - mamá e hijo, junto con los valores más que cantados, aplicados al día a día, forman parte de nuestro sistema y han estado más latentes en esta nueva forma de enseñanza”. Adriana resalta que tratan a los niños y jóvenes como si fueran suyos, por eso están tan conectados con cada uno, con su historia de familia y eso ha sido otro factor para que no desistan de la escuela en línea. Hasta el 31 de agosto permanecen con el 50 por ciento de descuento en la inscripción para alumnos de nuevo ingreso.
