Reportan el cierre de al menos 50 restaurantes durante el pasado fin de semana, por no ser costeable su reactivación. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Durante este fin de semana hubo restaurantes que optaron por no abrir porque les resultaba incosteable por tener que cerrar temprano y sin vender alcohol.
El presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Miguel Camacho Herrera, admitió que hubo medio centenar de establecimientos que tomaron esta determinación.
"Contamos 50 restaurantes dentro del sector formal que prefirieron no abrir porque no era factible por la reducción de horario y por el domingo la ley seca", señaló el dirigente empresarial.
Fue claro al señalar que no se trata de obstinarse en oponerse a la restricción en la venta de alcohol, sino que se trata de uno de los factores que mayores ingresos les representa a este sector, que ha sido de los más afectados a causa de la pandemia de COVID-19.
"Esta restricción esta semana sí fue un 50 por ciento menos de entrada a nivel general en los restaurantes y lo que más nos duele también es que fue otra semana de atraso en rentas, traemos toda esta 'bola de nieve' de deudas de las que no podemos salir", lamentó.
Otro de los aspectos adversos, fue el decreto mediante el cual el Gobierno del Estado y el Ayuntamiento redujeron los horarios de apertura comercial, así como de venta de bebidas alcohólicas, se refleja en las pocas propinas para el personal que trabaja en los restaurantes.
