La Canadevi estima que será hasta el 2021 que se reactive la construcción ante la parálisis financiera.
La Cámara Nacional de la industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi) en Durango estima que será hasta 2021 que se reactiven los proyectos de construcción a nivel local. Al 2020, además de un comienzo difícil, se le suma la parálisis económica derivada de la pandemia de COVID-19.
Los meses de enero, febrero y marzo tuvieron un desplome de entre el 10 y el 20 por ciento de los proyectos de vivienda planeados para ejecutarse durante este año. Juan Manuel Ayala Mercado, Presidente en Durango del organismo, explica que la razón fue la cancelación de subsidios para vivienda por parte del Gobierno de la República.
Al inicio del segundo trimestre, las medidas de confinamiento de la población y el cese de operaciones de negocios y empresas no esenciales agravó la crisis de las empresas desarrolladoras de proyectos de vivienda.
"De acuerdo a lo que estamos observando, en lo que resta del año ha bajado de manera muy considerable el registro de nuevas construcciones de vivienda, lo cual nos va a llevar a una disminución importante del número de viviendas al final del año".
Los desarrolladores esperan mayor claridad en el mercado, derivado principalmente de la posibilidad de pérdidas masivas de empleo, que llevaría a los trabajadores a dejar de cotizar en fondos de ahorro para la adquisición de inmuebles o a evitar acceder a créditos bancarios para la compra de una vivienda.
Ayala Mercado apuntó que las proyecciones de los desarrolladores de vivienda apuntan a que será hasta el primer trimestre de 2021 cuando empiece la recuperación de los proyectos inmobiliarios a nivel local.
ALZA DE PRECIOS
Debido a la paridad del peso con el dólar, los insumos de importación han experimentado incrementos considerables durante esta temporada.
El representante de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de la Vivienda apuntó que la variación de precios se ha visto reflejada en la compra de vidrios, chapas, insumos eléctricos, puertas, entre otros.
Sin embargo, debido a las actuales condiciones económicas son los constructores quienes absorben el impacto económico, esto como una manera de incentivar que la población que está en busca de una vivienda pueda adquirirla a pesar del escenario económico.
La decisión dijo, ha impactado en el margen de ganancia proyectado para los desarrollos de vivienda, pero se busca mantener las operaciones con el mínimo de afectación tanto para las empresas como para los empleados contratados en cada una.
