La madrugada del pasado martes 21 de abril falleció el recio defensa central uruguayo Gisleno Medina, quien llegó a México en 1969 para el equipo Atlante y se retiró con Zacatepec en 1974 por un problema renal. Representó a su país en los Juegos Panamericanos de 1963 en Sao Paulo, Brasil. Fue campeón en Primera B con el equipo Colón de Santa Fe de Argentina en 1965 y jugó de 1967 a 1968 en el Deportivo Cúcuta de Colombia.
Gisleno Julián Medina Leites, su nombre completo, nació el 29 de octubre de 1941 en Montevideo, Uruguay, con el que debutó en Primera División en 1960 y permaneció hasta 1964. En Argentina fue todo un referente en el equipo Colón de Santa Fe, en el que militó también su hermano Orlando Medina.
De Argentina emigró al Deportivo Cucuta de Colombia y en 1967 iba a ser contratado por el equipo América de Cali, pero no pudo hacer efectivo el contrato porqué enfermó su esposa y a los 15 días falleció. En alguna ocasión comentó que a consecuencia de la muerte de su cónyuge cayó en una gran depresión, retirándose temporalmente del futbol por esta causa.
Reconoció que fue el técnico uruguayo Dagoberto Moll, quien lo sacó de la reclusión en que vivió durante dos años y lo invitó a venir a jugar a México con el equipo Atlante, en el cual formó parte de una generación de jugadores importantes de los Potros de Hierro que lograron hilvanar una racha consecutiva de 15 partidos sin perder al mando del técnico vasco don Ángel Zubieta, en lo que fue un gran arranque de los azulgranas en la temporada 1970 - 1971.
En la temporada 1973 1974 emigró al equipo Zacatepec, en donde fue hospitalizado de urgencia y ahí se descubrió que había nacido con un solo riñón, por lo cual los médicos le prohibieron seguir jugando. A su retiro profesional estudió para Director Técnico y se graduó en 1975 en la Escuela de Entrenadores de la Federación Mexicana de Futbol. Ese año fundó y dirigió el Deportivo Morelos de Segunda División con el cual fue subcampeón en ese torneo.
Durante más de 30 años se dedicó a la actividad de promotor de jugadores, proyectó al profesionalismo cuando menos a 80 futbolistas. En 1999 creó la Copa México, torneo amateur que fue un semillero importante durante cinco años, llevando a los equipos ganadores a competir a torneos internacionales en Argentina, Brasil y Uruguay.
Promovió de manera especial a jugadores hondureños en nuestro país, al Santos Laguna trajo a la inolvidable dupla de Juan Flores y Dolmo Flores, Tomás Roche y Luis Calix, al entrenador José de La Paz Herrera, “Chelato’’ Herrera, y al uruguayo Luis Heilman. Gisleno representó en el 2002 al goleador Jared Borgetti, entonces jugador de los Guerreros, quien después del Mundial de Corea - Japón 2002 fue pretendido por el equipo Hertha de Berlín. En su tarea de promotor tuvo como colaborador a Heriberto López Fuentes, ex portero del equipo verdiblanco.
Otros jugadores hondureños que trajo al futbol mexicano son Richardson Smith, Raúl Martínez Sambulá y César Augusto “El Nene’’ Obando al equipo Correcaminos UAT, Omar “Tyson’’ Núñez al Pachuca, Carlos Alberto Pavón Plummer al Necaxa y al panameño René Mendieta al Correcaminos UAT.
AQUELLA BRONCA DEL AZTECA
Al evocar a Gisleno Medina vino a la memoria lo sucedido el domingo cinco de noviembre de 1972 cuando el desaparecido equipo Torreón visitó al Atlante en el Estadio Azteca, en partido correspondiente a la sexta jornada de la temporada 1972-1973. En esa fecha los Diablos Blancos marchaban en primer lugar del Grupo Juan Carreño con ocho puntos.
El Torreón era dirigido por el uruguayo Carlos “El Tanque’’ Miloc y había tenido un buen inicio de campaña. Los jugadores extranjeros de los Diablos Blancos eran los argentinos Oscar Rolando Pierucci, Enzo Genoni y Aníbal Tarabini, los uruguayos Alberto “El Torito’’ Gómez y Sergio Silva, estos dos últimos habían llegado como refuerzos para esa temporada.
En el Atlante jugaban Gisleno Medina y su hermano Orlando, quienes tenían fama de “duros’’. El guardameta de los “Potros de Hierro’’ era Rafael Puente, actualmente comentarista deportivo, quien fue uno de los protagonistas de aquella bronca. Los Diablos Blancos tomaron ventaja en el marcador al minuto siete en un lanzamiento de Ramón Cruz para Enzo Genonni, quien fue derribado dentro del área azulgrana por Montes de Oca, marcando el árbitro de inmediato la pena máxima, la cual fue convertida en gol por el propio Genonni.
Al minuto 15 el Atlante empató el marcador en el cobro de un tiro libre ejecutado por Orlando Medina, así concluyó el primer tiempo. Se jugaba el primer minuto de la parte complementaria, Refugio “El Cuco’’ Estrada filtra un pase para Ramón Cruz, quien vence a Rafael Puente en la salida.
En el festejo del gol de los Diablos Blancos se caldearon los ánimos, pues Alberto “El Torito’’ Gómez se burló del portero Rafael Puente. El partido continuó y al minuto 70 fue expulsado Gisleno Medina, de inmediato José Luis Puente, hermano del arquero Rafael, le reclamó airadamente al árbitro central Francisco Ledezma y se inició la bronca.
Enardecido Rafael Puente empezó a corretear a los jugadores del Torreón por toda la cancha. El técnico Carlos Miloc participó también en la reyerta y cuando el portero René Vizcaíno trataba de poner paz recibió una patada de parte de Pedro “Perico’’ González en la ingle derecha y debió abandonar el partido para ser atendido en la enfermería del Estadio Azteca, ocupando su lugar Raúl Navarro.
Los policías encargados de salvaguardar el orden en el Estadio Azteca entraron a poner paz, pero fueron agredidos por los atlantistas Pedro “Perico’’ González, José Luis Puente y Pedro Orradre. El saldo final de la bronca fue de dos jugadores expulsados por parte del Atlante, el portero Rafael Puente y Gisleno Medina. Del Torreón recibió tarjeta roja Raúl Ramos. Después de más de 20 minutos se reanudaron las acciones y Atlante logró empatar el marcador con gol de José Luis Puente casi al término del encuentro.
Los Diablos Blancos de Torreón alinearon con René Vizcaíno en la portería, José Zamora, Raúl Ramos, Oscar Rolando Pierucci, Alejandro Martínez, Refugio “El Cuco’’ Estrada, Alberto “El Torito’’ Gómez, Salvador Ruiz, Ramón Cruz, Sergio Silva y Enzo Genonni. De cambio entraron Agustín “Guty’’ Estrada por Enzo Genonni y Raúl Navarro por René Vizcaíno. El Atlante jugó con Rafael Puente de guardameta, Montes de Oca, Pedro “Perico’’ González, Gisleno Medina, Ramón Valencia, Julio Cortés, Orlando Medina, José Luis Desachi, Pedro Orradre, Juan Ignacio Basaguren y Franco Gallina. De cambio ingresaron José Luis Puente por Juan Ignacio Basaguren y Armando Franco por Pedro Orradre.
Gisleno Julián Medina Leites falleció a la edad de 78 años, después de luchar durante casi cuatro años contra un cáncer cerebral que le fue diagnosticado en julio de 2016 y el cual lo alejó por completo de toda actividad. La salud del otrora defensa central se deterioró en sus últimos días debido a una infección en vías urinarias. Llegó a México después de vivir una etapa muy difícil y a su retiro profesional decidió quedarse a vivir para siempre en nuestro país. ¡Descanse en paz! ¡Hasta el próximo miércoles!
Sergio Luis Rosas [email protected]
