Luego de un largo tiempo sin salir por la pandemia de COVID-19, los equipos de la Bundesliga han regresado a entrenar, por lo que Trapp se considera afortunado de volver poco a poco a las actividades. (ARCHIVO)
El portero del Eintracht Frankfurt, Kevin Trapp considera una fortuna volver a entrenar de manera paulatina después del confinamiento obligado por la pandemia del coronavirus.
Luego de un largo tiempo sin salir por la pandemia de COVID-19, los equipos de la Bundesliga han regresado a entrenar, por lo que Trapp se considera afortunado de volver poco a poco a las actividades.
"Aunque sea en grupos pequeños, de todas formas ayuda bastante. Pasé tres semanas en cuarentena, a primera sin entrenamiento y las otras dos con el aislamiento obligatorio. No fue fácil, así que guardo mucho respeto para aquellos que están sobrellevándolo", dijo en entrevista con la Bundesliga.
A pesar de que los equipos regresaron a los entrenamientos en pequeños grupos, aún no sé sabe cuándo se reanudará la liga y el guardameta considera que no será lo mismo si se decide evitar al público en las tribunas.
"No sabemos cuándo regresará todo a la normalidad así que es tiempo de trabajar. Sin embargo, lo hacemos sin tácticas de equipo, cuando arranque lo más seguro es que será sin fans en las tribunas, así que es imposible predecir, yo creo que nuestros seguidores son los que nos han llevado a ganar varios partidos, será muy diferente jugar en estadios vacíos", aseguró.
Lo más difícil del confinamiento para el portero de 29 años, fue estar lejos de su prometida, la brasileña Izabel Goulart, quien se quedó atrapada en París cuando todo comenzó. Además, la pareja tuvo que posponer sus planes de boda.
"Ha costado mucho trabajo, primero por que teníamos la Euro en el verano y ahora apareció el virus. Así que está pospuesta –no cancelada-, en lo personal la extraño bastante, de eso no hay duda", indicó.
Kevin Trapp guarda la esperanza de que pronto se reanude la actividad y puedan concluir en un mejor lugar la temporada, además de remontar el marcador de 3-0 en su contra en los octavos de final de la Europa League ante el Basilea.
