El Paseo Morelos, uno de los puntos de la ciudad que regularmente registran gran “movimiento” los fines de semana, lució prácticamente solo debido a la contingencia por el COVID-19; solo se observó a una o dos personas caminando o sentadas en las bancas de concreto.
Debido a la contingencia que se vive en el país por el coronavirus, una buena parte de los ciudadanos de La Laguna sí ha acatado la disposición de permanecer en su domicilio para evitar el contagio de la enfermedad.
Negocios de comida y bares que se encuentran sobre el Paseo Morelos de Torreón y que regularmente cuentan con un gran número de clientes, permanecieron cerrados durante el pasado fin de semana, a excepción de dos o tres que se manejan con el giro de restaurantes, aunque se pudo observar muy pocos clientes.
Tanto la avenida como las calles aledañas lucieron sin "movimiento", solo se observó a una o dos personas sentadas en las bancas de concreto o caminando.
En la Plaza Mayor sí había algunas familias, se pudo ver a niños corriendo o haciendo alguna actividad en la explanada.
Mientras que en la Plaza de Armas, las personas de la tercera edad se resistieron a dejar de asistir, pues ahí es el punto de reunión de cada fin de semana, ya sea con el tradicional danzón, que al igual que todos los eventos, también se canceló; sin embargo, los adultos acudieron para pasar un rato de distracción, ya que argumentaron que "era peor permanecer" en casa.
