DICHOS DE SOR JUANA
ES TRIUNFO EL OBEDECER
DE LA RAZÓN EL DOMINIO
Se puede empezar este comentario con una paradoja: la máxima de los versos que lo originan muestran la pasión de Sor Juana por la razón. (Sor Juana era una apasionada de la razón.) En este paréntesis se funden los términos opuestos razón-pasión. En cambio, La Americana Fénix los muestra combativos e irreconciliables en una décima que dice: "En dos partes dividida / tengo el alma en confusión / una esclava a la pasión / y otra a la razón medida / guerra civil encendida / aflige el pecho importuna / quiere vencer cada una / y entre fortunas tan varias / morirán ambas contrarias / pero vencerá ninguna".
Pero volviendo a la sentencia tratada en este espacio se puede observar lo que de otra manera, es decir, en prosa, dice la paráfrasis: es un triunfo obedecer el dominio de la razón. ¿Por qué lo es? Porque al aceptar el hecho, quien lo acepta se muestra como alguien razonable, inteligente, bien dotado para ejercer su raciocinio, dueño de una amplia lucidez mental. Y pensando en la calidad intelectual de la racionalista Sor Juana, esas son características humanas sumamente valiosas. Sor Juana era convencida y recia racionalista.
Cuando alguien tiene el talento suficiente para obedecer el domino de la razón se exhibe como un ser verdadera y valiosamente pensante. Pero en muchas ocasiones los seres humanos se empeñan hasta la obcecación en imponer sus designios a pesar de la evidente razón en contra. Cuando el obcecado se decide a conceder la razón a su contrario se puede expresar lo que en un villancico dedicado a una santa de su admiración, Catarina de Alejandría, desde su racionalismo Sor Juana dice: "es triunfo el obedecer / de la razón el dominio".
