Kevin Stefanksi (c), nuevo coach de los Browns de Cleveland, dijo que no le interesa el pasado del equipo. (AP)
Kevin Stefanski causó una primera impresión favorable ayer. Vestía impecablemente, se condujo como un pulcro abogado, que articuló sus declaraciones adecuadamente. Derrochó confianza y pasión.
Pero ahora, tendrá que ganar. Y en Cleveland, ése suele ser el problema de los entrenadores.
"Estoy emocionado por este desafío", manifestó Stefanski. "Estoy listo para ello".
El excoordinador ofensivo de los Vikingos de Minnesota fue presentado como nuevo entrenador en jefe de los Browns. Es la 18va persona que asume el puesto en la historia del equipo y la décima desde que Cleveland reapareció como franquicia de expansión en 1999.
Stefanski es también el sexto entrenador contratado en los últimos ocho años por los propietarios Dee y Jimmy Haslam, cuyos antecedentes desastrosos en el nombramiento de coaches y ejecutivos constituyen la causa que mejor explica la incapacidad de Cleveland para ganar, junto con las pésimas selecciones en el draft.
Quizás han acertado esta vez.
Stefanski, quien pasó una temporada al frente de la ofensiva de Minnesota, hereda un plantel talentoso que quedó por debajo de las expectativas en 2019. Los Browns tuvieron una foja de 6-10, en medio de una serie de controversias, y pocos aspectos positivos.
Pero el entrenador negó que le preocupe el pasado, dijo que se concentra en el hoy y el mañana.
"El objetivo está en 2020", recalcó. "No miramos atrás, nos movemos hacia delante. Y espero que todos nuestros jugadores sepan eso también. Cuando ingresen en las instalaciones, en algún momento de abril, seguiremos adelante, y cualquier cosa que haya ocurrido en el pasado no afecta nuestro futuro. Así que simplemente confío en el grupo que tenemos.
Se trata del primer empleo de entrenador que desempeñará Stefanski en cualquier nivel. Comenzó como asistente menor de Minnesota en 2006. Dentro de esa organización fue aprendiendo en diversos puestos que lo prepararon como líder.
Trabajó bajo las órdenes de tres entrenadores durante 14 temporadas con los Vikingos y, aunque experimentó algunos cambios, desarrolló talentos que lo hicieron popular entre los jugadores y atractivo para los Browns.
