Los servicios de inteligencia de los dos países desactivaron un complot que planeaba cometer una serie de atentados durante Año Nuevo. (ARCHIVO)
Un trabajo conjunto entre los servicios de inteligencia de Rusia y el Buró Federal de Investigaciones (FBI) logró frenar un atentado en la ciudad de San Petersburgo que era inminente para la fiesta de Año Nuevo.
Los servicios de inteligencia de los dos países desactivaron un complot que planeaba cometer una serie de atentados durante Año Nuevo.
Dos ciudadanos rusos fueron detenidos por el Servicio Federal de Seguridad de Rusia, que agradeció al estadounidense FBI haber compartido información para desactivar la amenaza, señaló un despacho de la agencia Itar Tass.
Los dos detenidos fueron encausados por cargos para la preparación de un ataque terrorista y participación en una organización terrorista, de acuerdo al Código Penal ruso.
Además, en una llamada telefónica, el presidente Vladimir Putin agradeció a su contraparte estadounidense, Donald Trump, haber compartido la información, señaló el servicio de prensa presidencial.
Al final de la reunión ambos mandatarios acordaron continuar con la cooperación bilateral en materia de contraterrorismo, señaló el reporte.
