De los tres competidores aztecas que compitieron en tierras galas, dos se subieron al pódium en su respectiva categoría. (ESPECIAL)
En el Abierto de Francia, con categoría G-1 (10 puntos), el taekwondo mexicano no podía faltar en el podio, luego de que Bryan Salazar se colgó la medalla de oro, mientras que Carlos Sansores obtuvo la presea de plata.
Y es que Salazar, en la categoría de menos de 87 kilos, pasó la primera ronda bye, y en la siguiente venció a Moutapha Fall de Senegal en punto de oro. En los cuartos de final eliminó al ruso Khochbar Nurmagomedov por 7-5, y en la semifinal dio cuenta del francés M'bar N'Diaye por 21-10.
Ya en la final, Bryan derrotó al español Iván García por 17-15, en trepidante confrontación que mantuvo a los asistentes al filo de la butaca.
Por su parte, Sansores, en más de 87 kilos, avanzó la primera ronda bye y en la siguiente eliminó a Jonathan Laurent de Martinica por 22-2. En los cuartos de final venció al alemán Marek Langer por 21-1 y en la semifinal a Ayoub Bassel de Marruecos por 26-20. En la disputa por el oro, Carlos cayó ante el británico Lutalo Muhammad por 16-10.
Por lo que respecta a María del Rosario Espinoza, en la categoría de menos de 73 kilos, perdió en su primer combate ante la venezolana Carolina Fernández en punto de oro.
Los taekwondoínes regresarán a los entrenamientos en el Centro Nacional de Alto Rendimiento, rumbo al Grand Prix Final que se celebrará en Moscú el próximo mes de diciembre.