Internacional Migrantes Sebastián Piñera Republicanos Migrantes EUA Acuerdo Fronterizo

Irak, ¿una segunda Primavera Árabe?

Dado que las manifestaciones de ahora nacen por motivos similares

Las actuales manifestaciones en Irak recuerdan la “Primavera Árabe” de 2011 en Medio Oriente. (ARCHIVO)

Las actuales manifestaciones en Irak recuerdan la “Primavera Árabe” de 2011 en Medio Oriente. (ARCHIVO)

NOTIMEX

Las actuales manifestaciones en Irak recuerdan la “Primavera Árabe” de 2011 en Medio Oriente, dado que nacen por el descontento social, el estancamiento del crecimiento económico, el aumento del desempleo y la pobreza, el deterioro de los servicios públicos y la falta de oportunidades.

Los manifestantes iniciaron sus protestas el 1 de octubre, pero por primera vez desde la caída del régimen de Sadam Husein en 2003, lo hacen como ciudadanos iraquíes, portando sólo la bandera nacional, y no como parte de un grupo religioso o partido político, como cuando eran dirigidos por líderes clericales.

En esta ocasión, el movimiento de protesta no deja margen a la entrada de ningún grupo religioso o político, pero el gobierno no descarta que mientras pase el tiempo y el balance de víctimas crezca, un líder chiita encabece y organice mucho mejor las movilizaciones.

Debido a que los manifestantes, en su mayoría jóvenes desocupados, responden a movilizaciones convocadas en las redes sociales, las autoridades han cortado con frecuencia el acceso a Internet para evitar la comunicación, según NetBlocks, una organización de seguridad cibernética.

CAUSAS DE LAS PROTESTAS

Las protestas, que comenzaron en Bagdad y se han extendido a varias provincias del sur del país, son parte de un movimiento que ha llevado a miles de iraquíes a las calles para manifestarse contra la corrupción, el desempleo y la degradación de los servicios públicos.

Con el fin de detener las violentas protestas y responder a las demandas de los inconformes, el primer ministro iraquí, Adel Abdul Mahdi, anunció el 6 de octubre un plan de reformas, que incluye subsidios de vivienda para los pobres y préstamos para los desempleados.

Además, una indemnización para los familiares de los manifestantes fallecidos y un aumento de los recursos destinados a la formación profesional, consciente de que la causa de las protestas radica en el elevado desempleo.

Incluso, Mahdi se mostró esa ocasión dispuesto a dimitir, pero ahora se resiste a dejar el cargo alegando que no es lo mejor para la normalización. “Si el gobierno renuncia sin que haya un sustituto rápido, ¿qué haríamos?", se preguntó esta semana.

Explicó que, sin ese sustituto, el gobierno sería incapaz de llevar adelante algún proyecto, por lo que aseguró que la mejor opción es la disolución del Legislativo y la posterior convocatoria a elecciones anticipadas en un plazo de 60 días.

A pesar de las medidas económicas anunciadas por el jefe de gobierno, las protestas se reanudaron el 25 de octubre en Bagdad y las regiones meridionales y del centro del país, en especial Basora, Di Qar, Kerbala y Nayaf, entre otras zonas de mayoría chiita.

En la primera fase de protestas, entre el 1 y 9 de octubre, hubo al menos 157 muertos y unos cuatro mil heridos, mientras que en esta segunda ola van al menos 112 fallecidos y otros cuatro mil lesionados, según un reciente balance de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

La mayor parte de los manifestantes son chiitas, pues representan la mayoría de la población iraquí, sobre todo en el sur del país, rico en petróleo, pero con un elevado descontento por la mala gestión de las autoridades.

AMPLIA DESIGUALDAD PESE A GRAN RIQUEZA

Irak, ubicado en el suroeste de Asia, cuenta con una vasta riqueza petrolera. Incluso es el tercer exportador mundial, pero es incapaz de dar servicios mínimos a sus ciudadanos como electricidad y agua.

Por ello, nace la frustración de amplios sectores de la sociedad respecto a la clase política, que ha fallado en ofrecer condiciones de vida dignas, coinciden expertos.

En el caso específico del petróleo, cuya producción se duplicó en la última década, ubicando al país como el quinto productor a nivel mundial, según la agencia Internacional de Energía (AIE), la explotación de los pozos está en manos de empresas extranjeras como Total, Exxon o Shell.

Casi la mitad de la producción va a alimentar la maquinaria industrial de otras naciones, dejando a la gran mayoría de los iraquíes viviendo en la pobreza, con acceso limitado al agua limpia, electricidad, atención médica básica y educación.

La pobreza afecta a casi la mitad de la población iraquí, sobre todo a la de las provincias del sur del país, mientras el desempleo, cuya tasa no ha parado de aumentar, es del 23 por ciento según el gobierno, si bien el Fondo Monetario Internacional (FMI) lo cifra en 40 por ciento.

Cabe destacar que de los poco más de 38 millones de habitantes del país, unos 20 millones son jóvenes menores de 23 años, quienes critican al gobierno por contratar la mano de obra barata de 85 mil trabajadores extranjeros, en vez de a ellos.

Además de la pobreza, el desempleo y la frustración social, Irak es el duodécimo país más corrupto del mundo, de acuerdo con la lista de Transparencia Internacional.

Por ello, a casi nueve años de la llamada “Primavera Árabe”, los iraquíes exigen un cambio profundo del sistema de reparto del poder y la riqueza. No van a conformarse con reformas económicas superficiales y seguramente intensificarán sus protestas, en una especie de segunda primavera cuyo fin o solución aún no se vislumbran.

Leer más de Internacional

Escrito en: Primavera Arabe IRK

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Internacional

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Las actuales manifestaciones en Irak recuerdan la “Primavera Árabe” de 2011 en Medio Oriente. (ARCHIVO)

Clasificados

ID: 1639691

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx