Bajo la lluvia, afición vive un nuevo triunfo

Mitad de semana futbolera en la Comarca Lagunera, con los Guerreros recibiendo a las Chivas, en el segundo de tres partidos que se disputarán en el estadio Corona durante la semana, buscando Santos el primer lugar de su grupo en la Copa MX.

Los aficionados laguneros se toman con calma el torneo de copa, máxime con un horario que los haría salir algo tarde del estadio, cuando al día siguiente hay que llevar a los niños a la escuela y posteriormente acudir al trabajo. Pero eso no fue impedimento para estacionar el coche en el TSM, abrir puertas y cajuela, subir el volumen del estéreo y destapar algunas cervezas, el futbol siempre es fiesta y no importa el torneo, lo que importa es que juegan los Guerreros y había que ir a apoyarlos al recibir a uno de los equipos más populares del país.

Aparecieron pocos "Chiva Hermanos" laguneros, pero sí lucieron orgullosos sus camisetas rojiblancas, demostrando la lealtad hacia el equipo jalisciense que ha batallado enormidades, pero ya encontró un resquicio para soñar con la liguilla. Los dos entrenadores colocaron en la cancha equipos alternativos, destacando "El Cepillo" Peralta con las Chivas, recolectando palmas de los aficionados laguneros, quienes no olvidan las alegrías que les brindó el delantero nacido en La Partida, cerca del TSM donde anoche defendió otros colores.

Pocas emociones brindaron Guerreros y Chivas durante el primer tiempo, con los espectadores buscando motivos para celebrar, pero batallando para mantener la vista en el terreno de juego, ante las escasas ocasiones en las puertas. Comenzó el segundo tiempo y apareció una invitada muy poco esperada y bastante incómoda, la lluvia increíblemente irrumpió en una noche de temperatura cálida, sorprendiendo a los espectadores que optaron por moverse de sus asientos para buscar donde guarecerse de lo que por momentos fue un "aguacero".

Pero otros no se rajaron y mantuvieron estoicos su posición en el graderío, encontrando un respiro por parte de Tláloc, que bajó la intensidad de la lluvia y eso permitió "la chispa" que encendió el partido, al decretarse un penalti a favor de los Guerreros, bien cobrado por "La Bruja" Lozano, para adelantar a los Albiverdes en el marcador. Si la lluvia no era suficientemente increíble, sucedió otro percance pocas veces visto en el futbol: se lesionó el árbitro del partido y pudo ser sustituido por el cuarto oficial, convirtiéndose ya en una buena anécdota del TSM que está por celebrar su primera década de existencia.

Octavio Rivero siguió con su paso goleador al encontrar un "bombón" en el área y con ello sentenció el partido, que ya era una fiesta para los Guerreros, acompañados por su gente, que sin amilanarse por la lluvia, coreaba los olés, mientras los futbolistas se regodeaban tocando el balón de un lado a otro. Una nueva victoria para los Albiverdes que tomaron por asalto el liderato del grupo, quedando tranquilos al menos hasta el próximo mes de enero, cuando se reanude el torneo de Copa.