El calostro es una secreción altamente nutritiva de las glándulas mamarias de la cabra, a disposición del recién nacido después del parto, en la cabra la formación del calostro comienza a las cuatro semanas antes del parto.
Los componentes del calostro se derivan de la sangre y tienen mayor concentración en éste que en la sangre de los elementos siguientes; azúcar (lactosa), grasa (lípidos), calcio, fósforo, caseína, globulina y albúmina.
Para el recién nacido, el calostro es mucho más que un alimento altamente nutritivo, pues le da resistencia a las enfermedades a través de las inmunoglobulinas que contiene. Estas son anticuerpos contra las enfermedades que van ligados a la globulina del calostro.
Cuando la madre es expuesta a los patógenos de varias enfermedades y sufre de infecciones, su sistema inmune produce anticuerpos (resistencia a las enfermedades) contra los organismos específicos que causan la enfermedad. Los anticuerpos se encuentran principalmente en el suero de la sangre y de ésta pasan a las glándulas mamarias y al calostro en formación. Cuando el recién nacido ingiere calostro, también recibe estos anticuerpos contra los organismos infecciosos específicos que estuvieron presentes en la cabra.
Es recomendable el aprovechar ese fenómeno natural y vacunar a la cabra contra enfermedades que afectan a las cabritas, quienes recibirán protección contra ellas al consumir el calostro. Algunas enfermedades contra las que puede usarse ese método de trasmitir resistencia incluyen las diarreas y neumonías.
Aunque la madre tenga gran cantidad de anticuerpos contra las enfermedades comunes del recién nacido, estos no serán de ningún provecho, a menos que sean ingeridos por la cría. El mayor provecho se obtiene cuando el recién nacido consume calostro en las primeras dos horas después del nacimiento, se debe de asegurar un consumo de 250 a 300 ml. De calostro y de preferencia de 100 Mg. por ml. de Inmunoglobulinas.
En esta época en que inician los partos es muy recomendable el ponerle énfasis a esta práctica. La mayoría de los caprinocultores ya sabe de esta actividad pero mucha de las veces por descuido, negligencia o apatía no se dedica en dicho manejo, que a la larga le va a redituar enormemente.
La alimentación del cabrito en las primeras 72 horas de vida, se inicia cuando la cría se incorpora sobre sus patas al rato de haber nacido, y una vez que adquiere seguridad en esta práctica, naturalmente se dirige a las ubres de la madre para iniciar su alimentación; siendo en este momento recomendable observar el comportamiento de ambos, en especial a la madre en la cual podremos valorar el "comportamiento maternal".
La cría debe mamar dentro de las primeras 3 a 6 horas, de lo contrario se debe intervenir, porque puede haber una actitud de rechazo por parte de la madre, siendo así, se toma el cabrito y se le ordeña unas gotas dentro de su boca para instarlo a mamar. Se considera que 100 ml de calostro es una cantidad adecuada a ingerir en la primera toma, dosis que debe repetirse en el día de 4 a 6 veces los tres primeros días.
En otro aspecto, va nuestro Reconocimiento al Gobierno del Estado de Coahuila, que por conducto del Secretario de la SEDER, José Luis Flores Méndez y que en Representación del Gobernador Miguel Ángel Riquelme, realizo la entrega de los apoyos del Programa de Concurrencia con los Municipios, ya que el día 25 de este mes, entregaron 8 millones en subsidios a los productores de los 5 municipios de la Región Lagunera, San Pedro, Madero, Viesca, Torreón y Matamoros.
Este programa, es de los pocos que nos dejaron para el Estado, ya que desaparece el Progan, Fomento Ganadero, Crédito a la Palabra, el seguro de muerte del productor lo disminuyen al 50% al pasar de $40,000.00 que se les otorgaba a los familiares del fallecido, ahora solo se les otorga $20,000.00.
Ojala y Dios quiera y les dé la ilustración para que reconsideren el presupuesto Federal y se les otorguen algunas subvenciones a los caprinocultores de la Región Lagunera, por ser los mejores productores de leche de cabra del país.
