Por la falta de esos recursos, explica Riquelme que se han dejado de realizar algunas acciones. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Actualmente la Federación le adeuda a Coahuila alrededor de 600 millones de pesos, que hasta ahora se han dejado de recibir vía participaciones, según explicó el gobernador del estado, Miguel Riquelme Solís. Para este año la proyección era recibir alrededor de 26 mil millones de pesos.
El gobernador espera que este recurso baje a la entidad durante el último ajuste proyectado para el cierre del año, y destacó que no se ha recibido lo que corresponde a una entidad que ha incrementado sus ingresos propios este 2019 y que tiene además un ritmo de crecimiento de casi 4 por ciento, muy por encima de la media nacional.
La captación de ingresos propios ha venido a compensar el atraso en la llegada de las participaciones federales, "pero no es lo justo, lo justo es que nos den las participaciones que nos tocan", acotó el mandatario.
Por la falta de esos recursos, explica Riquelme que se han dejado de realizar algunas acciones. "Coahuila tiene calidad moral para reclamar más recursos, porque ha dado resultados positivos en sus indicadores".
Además atribuye la demora de la entrega de participaciones a posibles fallas en la fórmula de distribución y a la caída en la recaudación federal.
Según el gobernador, Coahuila es ejemplo en crecimiento y "en ello destaca la participación de las universidades, la oferta de mano de obra calificada, el aumento en derechohabientes del IMSS, la seguridad, la captación de inversiones y la generación de empleos, alrededor de 5 mil en un lapso de dos meses".
Riquelme dijo que el panorama del presupuesto federal 2020 no es nada alentador por la serie de fondos federales que tienden a desaparecer y los rubros en los que se aprobaron recortes de recursos en forma importante.
