Tras dos derrotas seguidas, los aficionados laguneros festejaron nuevamente un triunfo santista en la cancha del Corona. (JORGE MARTÍNEZ)
Para los laguneros, este fin de semana comenzó en el estadio Corona, con sus Guerreros regresando a casa, para buscar el regreso a la senda del triunfo, luego de la dolorosa goleada, de la que ya nadie se quiere acordar.
Desde temprano, algunos aficionados estaban con la duda de si habría partido o no, luego de la amenaza del Deportivo Veracruz y su solicitud de solidaridad para el resto de los equipos del futbol mexicano, aunque se generaron algunas dudas, en la generalidad, confiaban los laguneros en que Santos jugaba sí o sí. A lo largo del día se dieron manifestaciones de respaldo a los escualos, como en el Ascenso MX, entre Potros UAEM y Cafetaleros de Tapachula, aunque en la Liga MX, a lo más que llegaron Puebla y Atlas, fue a tomarse juntos la fotografía de inicio del partido.
En Torreón, sin embargo, rodó el balón, sin ningún contratiempo, mientras que en Veracruz, los Tigres doblegaban a unos Tiburones que no opusieron ninguna resistencia, finalmente, los aficionados querían ver futbol en el TSM, por lo que fueron complacidos. Hubo algunos que empezaron el fin de semana, desde la hora de la botana, ligándose al futbol en un maratónico viernes, una fiesta que esperaban redondear con una nueva victoria Albiverde y encomendándose a algún conductor designado, ya que los terribles accidentes viales ocurridos en esta región durante las semanas recientes, han endurecido la labor de vigilancia de los cuerpos policiales, en un esfuerzo loable y necesario, por disminuir o erradicar tales percances.
Ya adentro del estadio, los equipos salieron portando sus uniformes con el color rosa como principal protagonista, aportando desde su trinchera, a la importante labor de prevención del cáncer de mama, generando conciencia y donando fondos a asociaciones especializadas. En uno de los palcos, la familia de Jonathan Orozco lució globos que formaban el número 100, festejando el centenario de partidos que el regiomontano ha disputado, vistiendo los colores verde y blanco, convenciendo a propios y extraños, de que tiene los merecimientos para ser el capitán del equipo.
TRIUNFOS
y un empate tienen los
Guerreros en siete partidos
que han disputado en el Corona.