Unos 300 efectivos de las Fuerzas Especiales de la Policía Nacional de Perú resguardan hoy la sede del Congreso. (EFE)
Unos 300 efectivos de las Fuerzas Especiales de la Policía Nacional de Perú resguardan hoy la sede del Congreso, la plaza Bolívar y sus alrededores, luego que el presidente peruano Martín Vizcarra anunció la disolución del Parlamento y llamó a elecciones legislativas anticipadas.
Las calles aledañas a la sede del Parlamento fueron cerradas por los efectivos policiales para evitar el tránsito de peatones, mientras que los empleados que trabajan en los alrededores deben presentar su identificación para que se les permita el paso, reportó el periódico La República.
Luego que la tarde del lunes, el presidente Vizcarra anunció la disolución del Congreso, sólo la Comisión Permanente tiene permitido ingresar al recinto legislativo.
El despliegue policial es para evitar el ingreso al Parlamento de legisladores que no integren la Comisión Permanente y sus asesores.
La prensa local publicó fotografías en las que se muestra a cientos de efectivos policiales portando sus equipos antidisturbios en la plaza Bolivar de la sede del Congreso.
El presidente Vizcarra anunció la tarde del lunes la disolución constitucional del Congreso y convocó a nuevas elecciones legislativas anticipadas.
Horas más tarde, el pleno del Congreso aprobó una moción de incapacidad temporal de Vizcarra y designó a la vicepresidenta Mercedes Aráoz como la presidenta en funciones de Perú.
En momentos en que Aráoz juraba como presidenta en funciones, los altos mandos de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional, acudieron al Palacio de Gobierno a darle su respaldo a Vizcarra.
