INTERROGANDO A UNA PULGA
¿Cuál es su nombre?
Ctenocephalides felis, mejor conocida como la pulga del gato.
-Ser pulga del gato, ¿significa que no afectas a otras especies de animales?
Claro que no. Mi familia ha conquistado una gran cantidad de mamíferos diferentes, incluyendo aves, pero tenemos predilección por gatos y perros.
¿Tienes parientes cercanos?
Somos casi 2500 especies en todo el mundo.
Entonces ¿ésa es la razón por la cual el hombre no ha podido controlarlas?
Bueno, también ayuda nuestra facilidad para adaptarnos a todo tipo de medio, inclusive al hombre.
-¿El comportamiento de tus parientes es similar al tuyo?
Cada tipo de pulga tiene una forma de vida particular. Por ejemplo, mi prima la pulga de la rata vive en el piso y sólo se sube al animal para alimentarse, en tanto que nosotras no abandonamos a la mascota, a menos que seamos demasiados, nos apliquen un tratamiento o nuestra víctima muera.
-¿Cuál es su capacidad de reproducción?
Las pulgas hembras somos capaces de poner diariamente de 20 a 25 huevos... que la mascota se encarga de esparcir por toda la casa.
-¿Esto quiere decir que los huevos no se desarrollan sobre la mascota?
Claro que no. ¡Ahí esta el secreto de nuestra perpetuidad! Las pulgas adultas sobre el perro o el gato representan sólo el 5 por ciento de la población total; el resto se encuentra desarrollándose en: alfombras, sillones, jardines... por eso cuando aplican los insecticidas sobre la mascota, siempre hay más de nosotras... ¡Listas para atacar de nuevo!
-Fumigando la casa. ¿Podría exterminar totalmente a los huevecillos?
Difícilmente, nuestros huevos son impermeables a los insecticidas, gracias a una capa de quitina que los recubre.
-¿Nacen con un capullo protector?
Así es, las pulgas somos como las mariposas: cuando salimos del huevo, tenemos la forma de un gusano; después formamos un capullo donde estamos a salvo de los insecticidas; al terminar el proceso, ya somos la pulga adulta que todos conocemos.
¿Quiénes son sus aleados, y porque les han permitido extenderse tanto?
¡Ni te imaginas! El mismísimo dueño de la mascota, al no atender a su perro o a su gato, favorece el ciclo biológico de nuestra especie.
¿Quiénes son sus peores enemigos?
¡Los veterinarios! Ellos conocen mucho de nuestras vidas, ellos nos eliminan de cuatro maneras; matan a los adultos con un insecticida bien aplicado, eliminan a nuestra descendencia con un inhibidor del crecimiento, recomiendan fumigar los lugares donde vive y transita la mascota y por último el mantener una mascota sana, con una buena alimentación y chequeos constantes, no hay forma de reproducirse y continuar con nuestra supervivencia.
