el siglo de torreón / Cuauhtémoc Torres
Advierten sobre el riesgo de consumir agua con altos niveles de arsénico; Jorge Antonio Espinoza Femat, doctor en medicina molecular en Oxford, e investigador de la Facultad de Medicina de la Universidad Juárez del Estado de Durango, presentó a la comisión de Salud del Municipio, cifras y estudios que revelan la relación entre este mineral con el desarrollo de diversos cánceres.
Dijo que en nuestra región "los cánceres han logrado superar como causal de muerte a los males cardiovasculares", (según mapa sobre cáncer en Houston, EUA donde Torreón tiene una banderita distinguiéndolo)
Por más de 40 minutos, regidores que integran la comisión escucharon la ponencia del doctor, quien manifestó que estudios de expertos en la materia de diferentes partes del mundo, especifican que el daño a la salud de las personas es de consideración.
Uno de los objetivos de esta reunión fue buscar alternativas que sirvan para reducir el arsénico cuando llega a los hogares y antes de que sea consumido por los humanos.
Una de las propuestas es la instalación de filtros en las bombas o pozos abastecedores, así como en las casas de los ciudadanos.
Espinoza Femat dice que eliminar el arsénico del agua es un proceso relativamente fácil, pero que el problema es coincidir en una solución masiva y que implique bajos costos, ya que actualmente el mantenimiento de las bombas es caro, sin embargo dice que hay más posibilidades.
Durante la primera ronda de preguntas, la regidora Dulce Pereda cuestionó al experto sobre las posibles soluciones.
Por su parte Ignacio García, dijo que la autoridad tiene que buscar mecanismos para reducir este problema al máximo.
Incluso, en la reunión se llegó a mencionar cómo solución traer a la ciudad agua de la presa, a lo que el experto lo consideró como una buena opción.
En su presentación, el investigador mostró a los presentes los diversos daños que causa a la salud el consumo excesivo de arsénico.
También en base a unas láminas, señaló que el problema de arsénico en la Comarca Lagunera es preocupante, al compararlo con ciudades como Phoenix, Arizona, y algunas partes de Chile y Argentina.
Explica que mientras se obtenga agua a mayores profundidades, la lata concentración de metales afecta la salud con casos como cáncer, tiroides, problemas de piel, pulmón y más.
Sin embargo, dice que es muy complicado atribuirle al arsénico ser la causa específica de algún cáncer, ya que éste es una enfermedad multifactorial.
"Básicamente las alternativas son las de buscar tecnologías baratas para eliminar al arsénico, lo que pasa es que los procesos que usamos actualmente no son tan baratos, y para ser una solución generalizada es caro. Por ejemplo el agua embotellada no tiene arsénico, pero cuesta".
Y añade: "meter agua de la presa estaríamos reabasteciendo los mantos y esto disminuiría la concentración de arsénico, pero esta solución la considera costosa".
El acuerdo al que se llegó en la comisión es la de organizar una reunión entre las comisiones de Salud y del Agua, para analizar las alternativas de solución al arsénico.
En esta reunión será presentado el proyecto y propuesta del ingeniero Jesús Moreno, quien ha inventado un sistema a bajo costo que ya empezó a desplazar los tradicionales que utilizan grandes metrópolis de Estados Unidos, entre ellas Phoenix, Arizona.
Al cuestionarle sobre las estadísticas de los efectos del arsénico en la salud, explicó que no se puede definir que el arsénico sea la causa directa de un cáncer.
"Entonces esta es una de las grandes limitantes para dar números objetivos sobre el caso, pero de que hay problemas los hay", manifestó el experto.
