El 24 de julio pasado una de las poblaciones de mayor antigüedad en la laguna de Coahuila cumplió un aniversario mas de su fundación, en razón de que nuestra ciudad de Torreón dependió judicial y religiosamente de la misma, nos hemos propuesto dar a conocer en unos cuantos renglones los antecedentes con que contamos de la población de referencia, ya que la misma hoy ciudad, influyó notablemente en el desarrollo de Torreón tal y como lo afirmamos al inicio de este párrafo.
En el año de 1730 un grupo de indígenas habitantes de Parras, solicitaron que les fueran mercedadas unas tierras ubicadas entre el paraje del Álamo y el Ojo de agua de Juan Guerra, solicitud a la que se opusieron los herederos de don Pedro de Echeverz a quien se le habían otorgado en el año de 1700, por tal motivo en un principio se les asignaron las tierras que en ese entonces eran conocidas como "El paraje de Santa Ana de los hornos", concediéndoles igualmente tierras para agostadero, señalándoles el término de un año para ocuparlas.
Los solicitantes de tierras al conocer que las tierras que les habían sido mercedadas eran propiedad de los jesuitas del colegio de Parras, decidieron no aceptarlas continuando con la solicitud original. Los peticionarios de tierras ante el alcalde mayor de Parras iniciaron un juicio para que les fueran adjudicados los terrenos conocidos como "El paraje del Álamo" y después de un prolongado proceso al comprobarse que tal superficie de tierra no había sido poblada en un lapso de 30 años, la merced había caducado, les fueron adjudicadas las tierras en cuestión al grupo de solicitantes.
El 24 de julio de 1731 los comisionados por el gobernador de la Nueva Vizcaya procedieron a dar posesión a 45 familias entre las que se encontraban las de don Simón Fernández de Barraza, Manuel Gabriel, Simón Adriano, Lázaro Gabriel, Juan Agustín, Antonio de la Cruz, Melchor Rey, Esteban Zacarias, Gregorio de los Santos, Vicente Martínez, Pascual Hernández, Fernando Lorenzo, Isidro Bonifacio Villegas, Marcos Fernández, Andrés Javier, Cipriano Alejo y 33 familias más, correspondiéndole al capitán Simón Fernández de Barraza ser la primera autoridad del naciente poblado.
Después de la elección de las autoridades entre las que citamos gobernador, alcaldes, regidores y fiscal, los que duraban dos años, se procedió a repartir los espacios en donde se ubicaría, la plaza, el templo, la casa real, la cárcel y los sitios para cada familia, el cual constaba de casa, huerta y corral, correspondiendo al Virrey Márquez de Casafuente la fundación del pueblo el 8 de mayo de 1732. Los fundadores de Viesca según la gran mayoría de los historiadores eran descendientes de los primeros Tlaxcaltecas que fundaron Parras. Para 1767 el poblado contaba con 500 habitantes.
El primer nombre que recibió el poblado de referencia fue el de "San José y Santiago del Álamo", después recibió el nombre de "El álamo de Parras" después "Villa de San José de Viesca y Bustamante" en honor al primer gobernador de Coahuila y del presidente de México. Actualmente se le conoce exclusivamente con el nombre de "Viesca".
