Ninguna mujer ha llegado a la Luna, pero sí fue una mujer la que estuvo detrás del código informático que permitió que la misión llegara a su destino. (ARCHIVO)
Los estudios e investigaciones que ha hecho la astrónoma Julieta Fierro la han llevado a concluir que fueron cerca de 400 mil personas las que trabajaron durante años en la misión para llegar a la Luna.
“Yo soy muy miedosa, pero la industria Mattel me hizo señora Barbie: hicieron una Barbie astronauta en mi honor, así es que en espíritu yo soy astronauta”, afirmó la investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Ninguna mujer ha llegado a la Luna, pero sí fue una mujer la que estuvo detrás del código informático que permitió que la misión llegara a su destino.
La científica estadunidense Margaret Hamilton posa a lado de una pila de papeles, casi del mismo tamaño que ella. No usa traje espacial, sólo unos lentes, falda y saco. Ella fue parte de ese equipo que estaba detrás.
“Yo estaba ya en la Facultad de Ciencias, estaba estudiando Física; habían venido los astronautas soviéticos a México y me acuerdo que en uno de mis libros un astronauta me firmó una dedicatoria. Era esta emoción de que ahora sí el universo estaba ahí para nosotros”, comentó Julieta Fierro.
En entrevista con Notimex, recordó como vivió el momento del alunizaje. Dijo que lo vio en casa de su novio, con sus papás y su hermano y fue curioso porque “mi exsuegro consideraba que las mujeres no debían de estudiar, y Física menos. Entonces, él estaba muy reticente de que viéramos aquello, pero fue muy emocionante”.
Hamilton escribió 15 libros para llegar a encontrar la fórmula que haría salir al Apolo 11 de la Tierra. La órbita exige una velocidad de 11.2 km por segundo para alejarse del planeta y escapar.
Julieta Fierro mencionó que “no teníamos la tecnología lista para eso; el proyecto se tuvo que subdividir en secciones, unas personas trabajaron el cohete, otros en la sonda que iba a aterrizar, otros en la cápsula. Había desacuerdos en qué era lo más importante”.
Aseguró que “murieron personas en los experimentos; por ejemplo, hacían experimentos para ver cómo iba a caer la cápsula y para ver si iban a sobrevivir los astronautas, murieron personas allí. De eso no se habló obviamente”.
La astrónoma mexicana dijo que “todo el proceso de crear la misión fue muy complicado porque se tuvieron que subdividir los procesos en muchas cosas y muchos de los intentos que se hacían, por ejemplo, en el retorno de la cápsula, fueron particularmente complicados”.
“Si la sonda entraba mal, podía rebotar sobre la atmósfera, así como hay piedras que uno lanza sobre el agua y rebotan, y podían volverse ir al espacio, o si caía en un ángulo demasiado inclinado, el tiempo para atravesar la atmósfera iba a ser demasiado grande, se iba a incendiar y no iban a sobrevivir los astronautas”.
Fierro dijo que “hasta llevaron un machete los astronautas, porque era tan incierto el lugar en donde iban a aterrizar que estaba cerca de unas islas tropicales que pensaron: ´si falla y caen en la isla y tiene que salir de la sonda, tienen que salir a machetazos´. ¡Quién iba a pensar que llevaron un machete a la Luna!”.
A estas curiosidades se suma una piedra que trajeron de la Luna. Después de estudios, se dijo que ésta pertenecía a la Tierra y probablemente llegó hasta allá cuando un meteorito se estrelló contra la superficie de nuestro planeta.
