El director de Inspectores admitió que es usual que los lugares vuelvan a abrir, por lo que el MP debe actuar, ya que es un delito. (EL SIGLO DE TORREÓN)
La venta clandestina de alcohol es una de las quejas recurrentes en diferentes asentamientos de la capital.
Tal como sucede con el problema del narcomenudeo, los ciudadanos señalan que ninguna autoridad atiende sus denuncias.
Cuestionado al respecto, el director de Inspectores Municipales, Herman Martínez, precisó que en los últimos meses han logrado cerrar 40 establecimientos conocidos como "ventanas".
Informó que su personal se ha apoyado de los elementos de la Base de Operaciones Mixtas (BOM) para clausurar estos lugares, ya que los inspectores no tienen otra arma más que la pluma con la que levantan el acta administrativa, la cual es aplicada a los propietarios que incurren en esta irregularidad.
Destacó que eliminar el clandestinaje es facultad del Agente del Ministerio Público. "A nosotros nada más nos compete levantar el acta correspondiente", dijo.
La BOM comenzó operaciones en febrero, por lo que se puede estimar que en menos de cinco meses procedieron a cerrar 40 ventanas clandestinas de alcohol en esta ciudad.
CONSECUENCIAS
El problema afecta varias aristas, dos son la seguridad y economía. Empresarios han señalado que se ven afectados por la competencia desleal que sufren los establecimientos formales.
En materia de seguridad, habitantes de diversas zonas han señalado que se ven a menores en diversas ventanas, tanto de madrugada como los domingos a más de las cinco de la tarde.
El director de Inspectores admitió que es usual que los lugares vuelvan a abrir, por lo que el MP debe actuar, ya que es un delito.
SOBRE LA FERIA
Destacó que ya están listos para la inspección de antros y bares que se instalen en la Feria Nacional Durango, a fin de evitar que se venda alcohol a menores de edad.
