Historias de la creación del mundo.
El Señor hizo los girasoles.
¡Qué hermosos los girasoles que creó el Señor! Parecía que sus pétalos, de un intenso color amarillo, se hubiesen pintado con el sol que las flores seguían por la curva del cielo. Las grandes corolas eran como pequeños soles que giraban también sobre el paisaje.
Eran aquellos tiempos otros tiempos, y el hombre tenía aún ojos para maravillarse con la obra de Dios, y para verlo en sus obras. Así, Adán dijo al Creador con voz emocionada y llena de admiración:
-¡Señor! ¡Qué hermosos los girasoles que hiciste!
-Y éstos no son nada -respondió el Creador-. Espera a ver los que pintará Van Gogh.
¡Hasta mañana!...