Doug McGlashan, quien trabaja en el departamento de refacciones, dijo que el presunto asesino era un exempleado. (AP)
Un hombre que fue despedido de un concesionario de automóviles en el norte de California regresó con un arma de fuego, y mató a tiros a dos gerentes y se suicidó, dijeron policías y testigos.
La policía que se presentó la tarde del martes en la agencia Ford Store Morgan Hill encontró a un hombre muerto por lo que parecía ser una herida autoinfligida, tirado afuera de un área de servicio.
“En su mano había un arma de fuego, una pistola”, dijo el sargento Bill Norman a la prensa en Morgan Hill, cerca de San José en el área de la bahía de San Francisco.
Los empleados llevaron a los agentes al interior del edificio donde encontraron a otros dos hombres que habían sido baleados y murieron en el lugar de la escena.
Doug McGlashan, quien trabaja en el departamento de refacciones, dijo que el presunto asesino era un exempleado, reportó la televisora KRON-TV.
“Alguien de la agencia fue despedido hoy, regresó y al parecer simplemente baleó a dos gerentes que obviamente lo habían despedido”, dijo Jordan Valdez, empleado del área de servicio de la agencia, reportó el periódico East Bay Times.
Valdez estaba afuera del departamento de servicio cuando sucedió el tiroteo.
“Nadie realmente se odiaba, por lo cual estoy realmente sorprendido con esto”, dijo Valdez.
La policía no identificó de momento al hombre armado ni a las víctimas.
