La expresidenta argentina, Cristina Fernández, estuvo ausente durante la primera etapa del juicio público y oral en su contra. (EFE)
Con la lectura de las acusaciones de fraude en la concesión de obras públicas a empresarios, presuntamente cercanos a su familia, concluyó ayer la primera etapa del juicio público y oral contra contra la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015).
En esta sesión del juicio fueron leídas 584 páginas de acusación fiscal contra la actual senadora nacional y otros 12 implicados, entre ellos exfuncionarios y empresarios. En la próxima audiencia del 1 de julio, iniciarán los "planteos preliminares", que podrán hacer todas las partes, incluidos los abogados de los 13 acusados.
La precandidata a la Vicepresidencia de Argentina estuvo ausente. El viernes pasado presentó un escrito al Tribunal Oral Federal 2 (TOF 2) en el que informó de un compromiso en el Senado que se superponía con la audiencia de este lunes, por lo que fue autorizada su falta, informó la agencia de noticias Xinhua.
El juicio comenzó el 21 de mayo pasado, con la lectura, por parte del TOF 2, de las acusaciones. El proceso pretende determinar si, durante su gestión en la presidencia, Cristina Fernández desvió obras públicas por unos mil millones de dólares en favor de la firma de construcciones Grupo Austral.
Desde que inició el juicio, Fernández denunció que enfrenta una "persecución" en su contra, en un año electoral en Argentina. Expertos judiciales estiman que por la cantidad de pruebas aportadas por acusación y defensa, y el número de testigos citados -unos 160-, las audiencias podrían extenderse durante casi un año.
Entre los testimonios se espera el del exjefe de Gabinete, Alberto Fernández, quien el 18 de mayo pasado fue anunciado como precandidato a presidente en una fórmula que compartirá con Cristina Fernández, en las elecciones generales de octubre próximo.
