La consulta a mano alzada con la que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, canceló el proyecto del Metrobús en La Laguna de Durango, no es vinculatoria y por lo tanto carece de validez, al igual que sucedería si se lleva a cabo la que planteó ayer, para que los ciudadanos decidan si se lleva a cabo o no dicha obra.
Constitución es clara
La Constitución es muy clara respecto de las características y requisitos que debe reunir una consulta popular, que de antemano es cuestionable que ésta se aplique para echar abajo un proyecto que sería de beneficio colectivo para los laguneros.
El síndico, José Lorenzo Natera señaló que en ambos casos, sería una ilegalidad ante la cual, el Ejecutivo estatal podría promover una controversia constitucional ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, para invalidar la decisión.
Destacó que de acuerdo con la Constitución, en las consultas populares debe participar por lo menos el dos por ciento de los ciudadanos inscritos en la lista nominal de electores, y deben ser reguladas por el Instituto Nacional Electoral (INE).
A pesar de ello, el presidente Andrés Manuel López Obrador propuso el pasado miércoles que en caso de llevarla a cabo para el tema del Metrobús, no se requeriría la intervención del organismo electoral, el INE.
Anulación
El presidente pretende anular la autonomía de los gobiernos estatales y municipales, que también está establecida en la Constitución Política de nuestro país.
