La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) consideró urgente replantear el rumbo de la política ambiental y energética del país, con base en acciones de mitigación y adaptación al cambio climático. (ARCHIVO)
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) consideró urgente replantear el rumbo de la política ambiental y energética del país, con base en acciones de mitigación y adaptación al cambio climático.
En este sentido, exhortó al Estado mexicano a ratificar el Acuerdo de Escazú, adoptado el 4 de marzo de 2018, que busca garantizar la implementación, plena y efectiva, en América Latina y el Caribe, de los derechos de acceso a la información ambiental, participación pública en los procesos de toma de decisiones ambientales y acceso a la justicia en asuntos de esta materia.
En ocasión del Día Mundial del Medio Ambiente, que se conmemora este 5 de junio, alertó sobre el impacto que generan las emisiones contaminantes a la atmósfera en el acceso al derecho a un medio ambiente sano.
Indicó que si bien en los últimos años la cobertura nacional respecto a Programas de Gestión para Mejorar la Calidad del Aire (ProAire) creció, aún existe una enorme área de oportunidad en la implementación de los mismos.
Recordó que emitió la Recomendación General 32 sobre las violaciones a los derechos humanos a la salud, un nivel de vida adecuado, medio ambiente sano e información pública ocasionadas por la contaminación atmosférica urbana.
En ella destacó que la capacidad técnica de la medición de contaminantes atmosféricos a través de las diversas unidades de monitoreo es insuficiente, ya que no se cuenta con la cobertura adecuada en el territorio nacional, por lo que medidas como las declaratorias de contingencia ambiental no pueden ser aplicadas en todas las ciudades del país.
