Concuerda. El actor, Ariel López Padilla, está de acuerdo en las acciones del actual gobierno para erradicar la corrupción. (ESPECIAL)
Para el actor y activista ambiental Ariel López Padilla la política no debe ser un negocio familiar, sino una vocación al servicio de la sociedad que él está dispuesto a desarrollar.
"Los partidos políticos son un club social y por eso los políticos que no quieren dejar sus curules, porque viven muy cómodamente ahí desde hace varios 30 o 40 años y aspiran morir en el changarro", opinó en entrevista.
Por eso "hay que abrir puertas a nuevas generaciones de políticos que verdaderamente quieran ser enlaces con la sociedad, atender las demandas populares y buscar resolver lo que requiere la gente", expuso.
A decir del actor, uno de los aciertos de la actual administración pública "es que ha evidenciado que todos los políticos padecían la misma enfermedad: cáncer social, que es igual a corrupción"
"La democracia hay que honrarla y no darle una lectura de negocio familiar", insistió López Padilla, quien desea a través de su trayectoria convocar a los jóvenes a romper con las estructuras hereditarias de los puestos políticos.
PONE EL EJEMPLO
Al respecto desde hace cuatro años él reparte su tiempo entre trabajos televisivos que le ofrecen y el desarrollo de proyectos con impacto social, pues desea en dos años postularse a un cargo público con el fin de servir a la sociedad.
El tema ambientalista será su línea de trabajo, por lo que estudia junto a expertos en la materia las decisiones que el actual gobierno está tomando en esta área.
En específico se refirió a la construcción del Tren Maya y señaló que no existen leyes para activar o desactivar ese proyecto, cuya decisión debe estar sustentada en bases científicas y tecnológicas.
"Tiene que haber sustento a partir de los expertos porque no es una decisión política, sino una que será trascendente para el futuro de nuestros hijos y del país", manifestó el actor, quien ha destacado por su labor en la televisión mexicana, especialmente en el drama Corazón salvaje.
Ariel expresó que está de acuerdo con que se reactive la red ferroviaria del país; "sin embargo en lugar de empezar con el Tren Maya, mejor empecemos con el México-Guadalajara o México-Querétaro".
Hay vías que están abandonadas y deberían ser activadas para "traer una derrama económica y turística", en vez de hacer un nuevo proyecto porque "no tenemos la tecnología para poder hacerlo elevado y evitar tragedias ambientales".
Preocupado por el impacto social y ambiental que pudieran traer estas decisiones, el actual residente en Cuernavaca, Morelos, instó a convocar a quienes sí saben del tema y aplicar una cultura ambientalista.
