“María, esta es la paradoja de la vida: muchas veces la verdad está oculta detrás del absurdo” […] Tal vez por eso hay que sufrir para conocer la felicidad, En Tierralma viven María y Raila; tienen diecisiete años y una vida entera de amistad y cariño. La familia de Raila es unda — nativa del lugar— y posee un gran sentido de las tradiciones y la solidaridad.
Cuando los padres de María llegaron al pueblo, ellos fueron los primeros en acogerlos en la comunidad.
María y Raila crecieron juntas y han sido confidentes y aliadas desde que tienen memoria, sin importar sus diferencias.
Además, cuentan con Elías, un amigo incondicional con quien pueden reír, llorar y solucionar el mundo.
Pero cuando una empresa de la gran ciudad pone sus ojos en esta tierra para construir una planta hidroeléctrica y el padre de María es designado en el proyecto, empiezan los problemas. ¿Cómo un extranjero, un faisé, va a tomar decisiones sobre el suelo en el que yacen generaciones y generaciones unda? ¿Acaso un extraño puede saber lo que es bueno para la población originaria? ¿Será la amistad de las chicas tan fuerte como para evitar una gran confrontación?
Sobre el autor, Mauricio Paredes estudió en la Pontificia Universidad Católica de Chile, donde se tituló de Ingeniero Civil Eléctrico con calificación máxima en su tesis.
Ejerció su profesión hasta 2001, momento en que decidió seguir su vocación literaria.
Ha publicado en Argentina, Chile, Colombia, El Salvador, España, México, Perú, Uruguay y Venezuela. Además de escribir, se dedica a la investigación y difusión de la literatura infantil. Ha sido guionista de televisión, profesor universitario, colaborador del Ministerio de Educación y presidente de la sección chilena de la Corporación Internacional del Libro Infantil, IBBY.
Realiza actividades con niños y charlas para especialistas. Ha participado como jurado del Concurso Nacional de Novela del Ministerio de Cultura de Chile, del Concurso Barco de Vapor de Ediciones SM Chile y del Premio Casa de las Américas en Cuba.
Fue elegido uno de los 100 jóvenes líderes el año 2007 por el diario El Mercurio. El año 2012 fue designado como persona pública distinguida por su contribución a la literatura durante la Feria del libro infantil de Providencia, Chile.
