A futuro. Raúl Quintanilla, director de la escuela de actuación de la televisora (Cefat), dice que es positiva la planeación. (AGENCIAS)
La televisión sigue cambiando y Azteca es muestra de ello. Desde hace tiempo la pantalla se ha enfocado más en los realities que en las telenovelas y de acuerdo a Raúl Quintanilla, director de la escuela de actuación de la televisora (Cefat), es algo positivo.
"Esta es una época transicional, se están preparando los próximos 15 años de la televisora, ¿por qué?, porque se sabe qué tipo de audiencia está llegando, el enorme potencial de la televisión abierta.
Hay que estar adelantándose a las épocas que vienen, el negocio de la tele está basado en gran porcentaje en la proyección, te vas preparando y en ese sentido tienes que dar barras de programación diferentes sabiendo a qué tipo de mercados puedes ir".
Al preguntarle sobre el éxito de algunos programas polémicos como Enamorándonos y el fracaso inmediato de otros como El poder del amor, que duró una semana, Quintanilla explicó: "Cuando tienes un programa de largo aliento puedes tener paciencia, respecto al entretenimiento hay algo que se llama impronta y el público reacciona o no". También agregó que aunque no comparta el gusto por algunos productos, no significa que no deban estar en pantalla.
"El hecho de que a uno no le gusten determinadas cosas no significa que uno desee el fracaso de sus productos".
