También se valoraron otros asuntos, como la igualdad y el estatus de la mujer. (TWITTER)
La sociedad civil de Túnez celebró ayer "una cumbre árabe paralela" para denunciar las cuestiones que no están en la agenda de los líderes de la Liga Árabe reunidos en ese país, como la defensa de los derechos humanos en una región que consideran "retrasada y huérfana de libertades".
Bajo el patrocinio del Sindicato tunecino de Periodistas (SNJC), diversas organizaciones locales de defensa de los derechos humanos organizaron varias conferencias sobre libertad de prensa y opinión, educación y transformación económica y social.
Sobre el tapete, también se valoraron otros asuntos, como la igualdad, el estatus de la mujer, los derechos económicos y sociales, la migración, la situación de las minorías, la pena de muerte, la tortura y la violación de la santidad física en el mundo árabe. Las conferencias se celebraron en la sede de la SNJC y en ellas participaron también la Unión de Periodistas Árabes y la Federación Internacional de Periodistas (FIP), además de la representantes de ONGs como Amnistía Internacional.
"A los líderes árabes: nos hallamos en un hito de la historia, en el que estamos expuestos a grandes riesgos que nos amenazan, como la guerra, la ocupación de Palestina, la injerencia extranjera, la dependencia, el extremismo, el terrorismo, la marginalización y la exclusión", explicaron en su comunicado final. Por ello, las organizaciones instaron a los líderes árabes a arrinconar el pulso político y a privilegiar proyectos comunes que eviten "el miedo, la violencia, la ignorancia, y la corrupción".