Lector opina

Foro del Lector

Frenesí gubernamental

Es de humanos errar, y de sabios, corregir. Amalgama de virtudes y defectos con predominio de unos o de otros hay en la personalidad de cada ser humano; y AMLO no es la excepción. Como primer mandatario de la nación ha acertado y también se ha equivocado; en algunas decisiones ha rectificado, pero en otras, la necedad ha imperado.

A cien días de asumir el máximo cargo político, los cambios implementados han avivado las esperanzas en los olvidados por los desgobiernos de tres décadas, y desatado los demonios de la inconformidad en aquéllos, cuyos intereses han sido afectados.

Tan patitiesos, alelados y anonadados quedaron los adversarios de AMLO que algunos aún no salen de su pasmo. Apenas empiezan a reaccionar y tratan de reagruparse y de conformar un grupo crítico, con fines de contrapeso, que más pretende ser de ciega oposición. Es el grupo de los perdedores, principalmente priistas y panistas que a todo cambio ven lo malo y critican negativamente lo que pudieron y debieron hacer en favor del pueblo mexicano, pero decidieron no hacerlo porque les pesó más la avaricia, la ambición desmedida por el dinero mal habido. Ahora ya es tarde, los que pudieron se subieron al tren de la 4T y aunque vayan en el último vagón van felices; mostrar sumisión no es problema para ellos, pues su fuerte es la simulación.

Pero en todo este maremágnum de ideas e ideales anidados en la mente de un líder, por cuando menos 12 años, vemos que en algunos temas de gobernabilidad se ha llegado a un impasse, en otros se han soliviantado los ánimos, y ahora algunos seguidores de AMLO se arrepienten de haber sufragado a favor de él; y hasta se atreven a decir que nos iba mejor cuando estábamos peor.

Pero, a decir verdad, creo que en la política, igual que en el trajín de la vida, no todo es blanco ni todo negro, sino de una variada gama de grises; mientras a unos se les cobija a otros se descobija; y en ese estira y afloja, se dan fricciones, se generan tensiones, frustraciones y agresiones que dividen y polarizan a grupos sociales. Su opinión siempre será según les vaya en la feria. El caleidoscopio es único y la poética reflexión del escritor y pensador español Ramón de Campoamor no ha perdido vigencia: “En este mundo traidor, nada es verdad ni mentira, todo es según del cristal con que se mira”.

Es claro que el recuento de los daños del régimen neoliberal es un pesado lastre que dificulta el avance del nuevo gobierno, aunque el trabajo es intenso, los logros parecen escasos pero en realidad son significativos; sin embargo, AMLO empieza ya a dar excusas, diciendo que “todavía hay por ahí (en el gobierno) algunos malandrines que siguen haciendo travesuras”, y lo que pide es tiempo, lo cual es comprensible dadas las condiciones deplorables en que quedó el país después de tres décadas de neoliberalismo. Oligarquía, plutocracia, mafia del poder, llámele como quiera pero la producción de bienes y servicios de toda la nación quedó en manos de unos cuantos mientras el gobierno en lugar de poner orden, se hizo comparsa.

Titánica tarea es la de AMLO, quien con aciertos y errores intenta poner orden en el caos, con decisiones e indecisiones que hacen parecer que el gobierno no tiene un rumbo fijo, pero sólo es una falsa percepción pues la meta principal es clara: hacer justicia al pobre pero sin agraviar a los ricos (nada fácil). Estemos tranquilos, AMLO busca un honroso lugar en la historia, consecuentemente, se descarta una dictadura.

Héctor García Pérez

Comarca Lagunera

Leer más de Lector opina

Escrito en:

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Lector opina

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1560285

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx