China aprobó el pasado 15 de marzo la Ley de Inversión Extranjera. (ESPECIAL)
La actual relación comercial entre Estados Unidos y China, representa una oportunidad para que México fortalezca lazos con el país asiático.
De acuerdo con datos de la Cámara de Comercio México-China, el intercambio bilateral en esta área entre nuestro país y la nación china alcanzó los 85 mil millones en 2018.
En el marco del aniversario de relaciones entre la República Popular China y México, el banco ICBC informó, a través de su presidente Chen Yaogang, que buscarán explorar nuevas áreas de negocios con México.
En un comunicado, destaca que en el primer semestre de 2018, las inversiones de China alcanzaron los 153.7 millones de dólares, según datos de la Asociación de Empresarios de Zhongua en México.
Para mejorar las condiciones a las empresas, China aprobó el pasado 15 de marzo, la Ley de Inversión Extranjera, la cual se espera entre en vigor a partir de 2020.
Entre las ventajas destaca otorgar certidumbre a empresas internacionales, promete mejores garantías en cuestiones de propiedad intelectual, además busca poner fin a la práctica de exigir a empresas internacionales a entregar tecnología crítica a socios chinos.
A pesar de que en la pasada Cumbre del G20, los presidentes de China y Estados Unidos anunciaron la suspensión de nuevas tarifas en comercio, la petición de extradición de la directora financiera de Huawei, Meng Wanzhou, por parte del gobierno estadounidense a Canadá, por supuestas violaciones a sanciones impuestas a Irán, enrareció el panorama geopolítico.
En este sentido, el director ejecutivo (CEO) de Casaez, empresa consultora en importación y exportación, Carlos López Espinosa, dijo que se considera que la nueva regulación puede satisfacer las demandas de Estados Unidos en el marco de las negociaciones para resolver la disputa comercial entre ambos países
A través de lo anterior, agregó, se pueden establecer mejores negociaciones.
Por ello, López Espinosa opinó que hay condiciones para invertir y exportar a China, dado que el país asiático considera a México idóneo para exportaciones de electrónicos y juguetes.
Por su parte, México podría exportar a China productos como tequila, mezcal y machaca, lo cual representaría una ampliación del comercio internacional entre ambas naciones.
